Los agentes de las Fuerzas de Seguridad interpondrán multas económicas a los ciudadanos que no cumplan con las restricciones al movimiento y el confinamiento en los hogares que se han incluido en el estado de alarma por la propagación del coronavirus. Las mismas no son excepcionales, sino que están recogidas en el Código Penal, la Ley de Salud Pública, la Ley de Protección Civil o la Ley de Seguridad Ciudadana.
En las últimas horas, los agentes de cuerpos policiales estatales, autonómicos y locales están recibiendo una circular específica no oficial, a la que ha tenido acceso Libertad Digital, en la que se les está especificando algunas de las sanciones que pueden interponer y por qué motivos en las actuales circunstancias. De hecho, este mismo domingo por la mañana algunos agentes ya han comenzado a poner las primeras sanciones.
La primera actitud que tendrán los agentes de las Fuerzas de Seguridad será la de explicar a los ciudadanos que no pueden estar en la calle y que, por favor, regresen de inmediato a sus casas, aunque en función de la actitud que tengan ante la advertencia o qué hayan hecho se procederá a sancionarles. Fuentes del Ministerio del Interior han explicado que los agentes actuarán siempre "aplicando criterios proporcionalidad".
- Quitar o retirar vallas, precintos u otros elementos fijos o móviles colocados por las Fuerzas de Seguridad para delimitar perímetros de seguridad. De 100 a 600 euros.
- La desobediencia y resistencia a las indicaciones de los agentes de la autoridad, no identificarse cuando ha sido solicitado o facilitar datos falsos de identidad. De 600 a 60.000 euros y desde 3 meses a un año de cárcel.
- La desobediencia o resistencia a las indicaciones de los miembros de los servicios emergencia e intervención cuando haya emergencias declaradas. De 1.500 a 30.000 euros. Las infracciones muy graves serán multadas de 30.000 a 600.000 euros.
- Las conductas u omisiones que puedan producir un riesgo o un daño grave para la salud de la población. De 3.001 a 60.000 euros. Si se hace de forma reiterada puede subir hasta 600.000 euros.