La abogada-jefe de Hacienda, Carmen Tejera, cesada el pasado miércoles por la abogada General del Estado, Consuelo Castro, era "un obstáculo" para la nueva financiación autonómica de Cataluña que prepara el Gobierno de Pedro Sánchez.
Según las fuentes consultadas por Libertad Digital, Tejera era toda "una autoridad jurídica en sostenibilidad presupuestaria y una experta en estabilidad económico-financiera". "Era muy respetada en el cuerpo de abogados del Estado por su competencia y desempeñó su labor para 5 ministros de Hacienda distintos durante casi 17 años", añaden.
Sin embargo, a ojos del Ejecutivo socialista cometió dos pecados capitales que le han costado el puesto: "Mantener la ejecución de la financiación autonómica conforme a la legalidad" y "apuntalar la malversación agravada contra Oriol Junqueras durante la pericial celebrada en el juicio del 1-O en el Tribunal Supremo".
Según las mismas fuentes, Tejera se había convertido en una "persona molesta" para que el Gobierno llevase a cabo sus nuevos planes de financiación para Cataluña. En este contexto, el nombramiento de Inés Olondriz hace 10 días como nueva secretaria general de Financiación Autonómica y Local, "ha sido clave y determinante para su destitución". Olondriz había desempeñado el cargo de directora financiera en el Ayuntamiento de Barcelona durante cerca de 20 años y ha sustituido en este cargo a Diego Martínez, cercano al PSOE.
"La posición del Gobierno respecto a la financiación autonómica de Cataluña cambió tras la reunión de Pedro Sánchez con Quim Torra del 21 de diciembre de 2018. Desde entonces, se eliminaron los controles. A partir de ahora, eran necesarios unos cambios para que la nueva financiación autonómica beneficiara más a Cataluña y que se hiciera la vista gorda en determinadas cuestiones". Unas vicisitudes por las que Tejera no habría pasado, ni querría pasar y que habrían provocado su cese.
Recordamos que el pasado mes de octubre, Carmen Tejera ya cuestionó que existiera base legal para que el Gobierno en funciones de Sánchez repartiera 4.500 millones de euros entre las Comunidades Autónomas antes de las elecciones. Por esta cuestión, se produjo un enfrentamiento con la ministra en funciones de Hacienda, María Jesús Montero.
La pericial sobre la malversación en el juicio del 1-O
El segundo pecado capital de Carmen Tejera para el Ejecutivo socialista fue "su pericial sobre la malversación agravada en el juicio sobre el golpe del 1-O en el Supremo". Tejera, junto a Sara Izquierdo y Teresa Hernández, fueron las peritos a quienes el Ministerio de Hacienda a cargo de Cristóbal Montoro encargó analizar el uso de fondos públicos del Gobierno catalán.
Sin embargo, el Gobierno cambió de color. "Desde que Pedro Sánchez llegó a la presidencia del Gobierno, no querían que se realizara en el juicio del 1-O la pericial para acreditar la malversación agravada, por encima de los 250.000 euros. Fue presionada para que no participara en dicha pericial, pese a que ella había realizado toda la investigación de la causa", afirman.
Cabe destacar que la malversación agravada se ha convertido, como adelantó este diario, en el principal escollo para que Junqueras y el resto de golpistas queden en libertad, mientras el Ejecutivo planea la reforma del delito de sedición en el Código Penal para beneficiarles.
La abogada general del Estado, Consuelo Castro, ordenaba su cese como responsable de esta institución en Hacienda este miércoles coincidiendo con el inicio de la mesa de diálogo entre el Gobierno de Sánchez y la Generalidad de Cataluña. Uno de los miembros de dicha mesa por parte del Gobierno catalán es Josep María Jové, ex número 2 de Oriol Junqueras considerado el arquitecto del 1-O.
Precisamente, este viernes cuando se conocía el cese de Carmen Tejera, Jové era procesado por el TSJC por el referéndum ilegal del 1 de octubre de 2017 por delitos delitos de desobediencia, prevaricación, malversación y revelación de secretos.