Medidas de seguridad excepcionales para más de 200 periodistas. El ambiente de excepcionalidad que se vive en el Palacio de la Generalidad de Barcelona se evidencia también en el protocolo: honores de gala están previstos para Pedro Sánchez a su llegada a la plaza de Sant Jaume, donde se ubica el Palau, por parte de la guardia de honor de los Mossos d’Esquadra.
Un gesto con el que podría contrarrestar el hecho de no salir a recibirle a las puertas del edificio del gobierno catalán para evitar la que podría ser la imagen del día: Pedro Sánchez y Quim Torra estrechando sus manos justo debajo de la pancarta en favor de la "Libertad de Expresión y Opinión" que sustituyó a la que pedía "Libertad para los presos políticos" y que motivó su inhabilitación por parte de la Junta Electoral Central, ratificada posteriormente por el Tribunal Supremo.
Una imagen a la que sucedería otra: el encuentro bilateral entre ambos presidentes en el que Moncloa no tiene demasiadas esperanzas pero que pretende utilizar para retomar la iniciativa política. Como adelantó Libertad Digital, el presidente del Gobierno comparecerá ante los medios de comunicación al término de la reunión, previsiblemente en solitario para distanciarse de Torra y no despertar suspicacias entre sus socios de ERC por concederle excesivo protagonismo al president.
En cuanto al fondo, la Secretaría de Estado de Comunicación avanza que el presidente Sánchez entregará a Torra la llamada "agenda del reencuentro". Un documento de seis puntos con la que pretende restablecer los puentes con la Generalitat en torno al diálogo político, mejorar la financiacion autonómica, la cooperacion, la politica social, el impulso de las infraestructuras y el apoyo ante catástrofes naturales como la borrasca Gloria.