El Gobierno enfría ahora la reunión que se celebrará este jueves en Barcelona entre el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el catalán, Quim Torra, de la cual "no tiene por qué salir una fecha". Así lo expresó la ministra portavoz, María Jesús Montero, quien dejó claro que "el Gobierno no espera frutos en el corto plazo porque sabe que son muy difíciles" sino sólo "poner los raíles para seguir transitando, seguir caminando".
El Ejecutivo rebaja expectativas porque pretende limitar el protagonismo de Torra y esperar a reuniones con sus socios de ERC "en los próximos días" que les permitan avanzar la fecha. Una manera de apuntalar el liderazgo de sus socios catalanes en un escenario preelectoral en Cataluña. Algo que no está reñido con el alegato de la portavoz en defensa del diálogo y el acuerdo. Montero llegó a comparar este martes la reunión Sánchez-Torra como "un hito" comparable a la reunión que mantuvieron el expresidente, Adolfo Suárez, y el líder del PCE, Santiago Carrillo, en la Transición española.
"Cuando se sentaron el señor Suárez y el señor Carrillo para hablar de temas tan trascendentes como la economía de mercado, los derechos sociales, el papel del Ejército o el papel de la Corona, se encontraban en las antípodas del pensamiento. Pero fueron capaces de trazar puntos de encuentro en donde pudimos alumbrar 40 años de prosperidad. Evidentemente los padres constitucionales, cuando se sentaron en torno a la Constitución, defendían modelos de España radicalmente distintos".
Referencia no casual sobre la Corona. La portavoz evitó hoy reprochar a sus socios republicanos el desprecio de este lunes de Gabriel Rufián plantando al rey Felipe VI tras una rueda de prensa en la que se insultó a la Corona y su "carácter antidemocrático". Según la portavoz gubernamental, "se mantuvo en todo momento el respeto" al Rey dentro del Hemiciclo aunque "a nosotros nos parece exigible el respeto a la figura del jefe del Estado estando presente y aplaudiendo. El gobierno, por supuesto, con su presencia manifiesta su apoyo al jefe del Estado, como viene siendo habitual".