Era su primera intervención como eurodiputado en Estrasburgo, y ante un hemiciclo prácticamente vacío, el expresidente catalán fugado, Carles Puigdemont, ha aprovechado su discurso, de apenas un minuto, para suplicar a Europa que no mire hacia otro lado respecto al "conflicto catalán". Puigdemont ha llamado al diálogo para negociar una solución política al mismo tiempo que ha pedido un mecanismo para ejecutar la ruptura de Cataluña con España.
"Cataluña es una cuestión interna de la UE, por eso, hay que encontrar una solución política dentro del diálogo y de la negociación. La Unión Europea tiene que avanzar para encontrar un mecanismo común democrático para abordar la autodeterminación". En un discurso en inglés, en busca de mayor impacto, Puigdemont ha apelado a Croacia, que este semestre ostenta la presidencia de turno de la UE, para acabar comparando Cataluña con los Balcanes. El fugado ha pedido "que la política europea hable y muestre al mundo que el derecho de autodeterminación es la vía más democrática para resolver problemas territoriales".
Catalonia is today a European internal affair. Therefore, a political solution must be found. Through dialogue and negotiation. The EU must advance to find common democratic mechanisms for self-determination. Repression cannot be an acceptable solution pic.twitter.com/nCz75NHwnH
— Carles Puigdemont (@KRLS) January 14, 2020
Inmediatamente después de su apelación al diálogo, los eurodiputados de PP y Cs, Dolors Montserrat y Luis Garicano, han recurrido al mecanismo parlamentario de las tarjetas azules, que contemplan las reglas de la Eurocámara, para solicitar turno de réplica y poder debatir con el fugado. Preguntado por la presidencia de la Eurocámara para saber si aceptaba estas réplicas, Puigdemont ha respondido con un imperceptible "no", negando a ambos el uso de la palabra. Montserrat ha tenido que recurrir a las redes sociales para responderle.
Un prófugo con miedo a que le digan que Europa es el antídoto a su nacionalismo destructivo ha rechazado mi turno de réplica en el pleno del Parlamento Europeo.
Ese es el temeroso Puigdemont. pic.twitter.com/6ncIsygMqH
— Dolors Montserrat (@DolorsMM) January 14, 2020
Sí ha podido censurar al expresidente catalán fugado el eurodiputado del PP, Esteban González Pons, que minutos antes de escuchar el discurso de Puigdemont, ha usado su turno de palabra para lanzar una advertencia: "Se debe señalar con el dedo a los nacionalistas, separatistas y separadores", afirmando ante la Eurocámara que "el nacionalismo es el enemigo de la paz".
Pese a que Puigdemont ha lanzado un mensaje a Europa, ningún alto cargo le ha querido responder, ni siquiera la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyer. Sí lo ha hecho el primer ministro de Croacia, Andrej Plenkovic, pero para negar que el proceso separatista haya sido un asunto a tratar entre los jefes de Estado y de Gobierno de la Unión. Plenkovic ha dejado claro que "es un asunto que debe ser resuelto en España"