La asociación de víctimas del terrorismo Dignidad y Justicia ha presentado en las últimas horas una denuncia contra la portavoz de EH Bildu en el Congreso de los Diputados, Mercedes Mertxe Aizpurua, por el contenido de la intervención que realizó el pasado domingo durante la segunda jornada de la sesión de investidura de Pedro Sánchez. Y es que consideran que se extralimitó en su derecho a la libertad de expresión y pudo cometer varios delitos.
Exactamente, según el texto de la denuncia presentada ante el Tribunal Supremo, el encargado en este caso de juzgar los posibles delitos que cometen los aforados, entre los que se incluye a los diputados de la Cámara Baja, podría haber cometido un posible delito de humillación a las víctimas del terrorismo y sus familiares, y otro de enaltecimiento del terrorismo y justificación de los delitos terroristas.
En la argumentación de la misma, se dice que la diputada de la coalición electoral en la que están integrados los herederos de Batasuna-ETA defendió "la presunta vulneración de sus derechos humanos" de los etarras, "tildando su forma de cumplimiento de condena como de crueldad extrema, ilegal, excepcional y vengativa, sin mención alguna o el más mínimo indicio de misericordia hacia las víctimas de todos esos verdugos".
Igualmente, recuerda que la portavoz parlamentaria hizo un llamamiento para acudir a dos actos que se celebrarán en próximas fechas tanto en Bilbao como en Bayona (Francia) en los que se exigirá el acercamiento de los terroristas de ETA que cumplen plenas de prisión en España y Francia a centros penitenciarios más próximos a sus lugares de origen.
"Dicha reivindicación no es para cualquier preso común que esté cumpliendo condena por el delito cometido, sino que se trata de una reivindicación sectaria que sólo comprende a los miembros de ETA que a su servicio cometieron actos terroristas, pero no a todos, sino sólo y exclusivamente a los que han seguido y siguen los postulados de ETA y que forman parte del EPPK o colectivo de presos de ETA", continúa la denuncia.
De igual forma, se pone de manifiesto que Aizpurua subió al estrado del Congreso con un pin en la solapa de su chaqueta-americana "que representa las comunidades del País Vasco y de Navarra, con dos flechas hacia dentro, que representa la vieja reivindicación de la banda terrorista ETA de acercar a los presos que siguen los postulados de dicha organización y forman parte del colectivo de presos". Todo ello, siendo consciente del daño que hacía a las víctimas del terrorismo.
"Su intención no era otra que la de hacer entrar y mantener presente, en la más alta institución de la democracia española, a los presos de la organización terrorista ETA, que tanto daño y dolor han causado a este país", añade.