Un informe de la Oficina Nacional para la Investigación del Fraude referido a Jordi Pujol exonera al ex presidente catalán de pagar multa alguna a pesar de que considera probado que cometió fraude fiscal al ocultar parte de su fortuna en Andorra.
El informe, remitido al juzgado de la Audiencia Nacional y adelantado por El Mundo, vincula a Jordi Pujol con un depósito bancario en la Banca Reig de Andorra, abierto en septiembre de 2000 y cancelado el 30 de diciembre de 2010. La cuenta habría estado administrada por Jordi Pujol Ferrusola y habría acumulado tras un único ingreso 307 millones de pesetas. Una carta también descubierta por la ONIF aclararía que el propietario de la cuenta, pese a que no la administrara, era Jordi Pujol.
El informe concluye, tras detallar las "periódicas imposiciones a plazo fijo" vinculadas a la cuenta, que Pujol defraudó a Hacienda 885.651,45 euros en el año 2000, es decir, cometió un delito fiscal, pero éste ha prescrito, con lo que no hay ya responsabilidad penal o administrativa.
El informe se enmarca en el denominado caso Pujol sobre la trama urdida por la familia del expresidente catalán, que confesó en 2014 que tenía dinero en el extranjero sin declarar perteneciente, según él, a una herencia.