Los CDR campan a sus anchas por Barcelona: amenazas y agresiones impunes

Los miembros de los Comités de Defensa de la República campan a sus anchas por Barcelona sin que la Guardia Urbana y los Mossos d'Esquadra osen enfrentarse a los grupos que interrumpen el tráfico en las principales arterias o a quienes se pavonean en los actos públicos. El último ataque ha tenido lugar en la sesión plenaria del distrito de Las Cortes de Barcelona celebrada el lunes, donde un individuo medio encapuchado agredió al representante en el pleno de Ciudadanos por tomar imágenes de la acción que estaban llevando a cabo los CDR

Dos mujeres y un hombre desplegaron una pancarta a favor de la "república catalana" en medio de la sesión plenaria. Al advertir el individuo que estaba siendo grabado se dio la vuelta y lanzó el puño contra el miembro de Ciudadanos, tal como se puede apreciar en las imágenes captadas por la víctima de la agresión.

No son las únicas imágenes sobre la impunidad de los CDR. El pasado fin de semana varios miembros de esta organización amenazaron a un conductor de autocar harto de los cortes de calles que se suceden sin pausa desde la publicación de la sentencia sobre el golpe de Estado. Los CDR le llamaron "fascista", "loco", "hijo de puta" y "burro", apuntaron la matrícula del vehículo para ponerlo en una "lista negra" mientras que los agentes de los Mossos d'Esquadra lejos de disolver a los violentos instaban al conductor a echar marcha atrás mientras la turba gritaba "¡multa, multa!" y lanzaba insultos contra el trabajador, que se quejaba ante los policías en vano. Sucedió en la salida de Barcelona por la Meridiana, lugar donde los CDR llevan dos meses cortando el tráfico a última hora de la tarde.

La impunidad es de tal calibre que ya ocupa espacio en la prensa internacional, según una nota del digital e-notícies que refiere un estudio publicado por The Washington Post en el que se afirma que los independentistas se han vuelto más "excluyentes" y están más dispuestos a aceptar la violencia para conseguir la independencia, un cambio acentuado tras la sentencia, según los autores del documento académico.