En un gesto para marcar músculo, ERC ha trasladado a su grupo parlamentario al completo a Madrid para preparar la segunda reunión con el PSOE en el Congreso de los Diputados donde el líder en estas negociaciones por parte de la formación separatista, Pere Aragonès, ha querido dejar clara la posición con la que ERC se enfrenta a este segundo cara a cara entre los equipos negociadores: exigir propuestas para una solución política para Cataluña antes que una investidura.
"A nosotros el tiempo no nos preocupa, sino los contenidos", ha dicho el vicepresidente catalán en la fachada de los Leones flanqueado por sus compañeros de filas desde donde el dirigente de ERC ha dejado claro que su objetivo es el de "trabajar porque haya un acuerdo que sea sólido y con garantías" y que eso, en ocasiones, es "inviable con que sea rápido". "Vamos a negociar con firmeza", ha añadido Aragonès a su mensaje de presión en el que ha descartado por completo que su partido, vaya a aceptar como oferta del PSOE hablar de cuestiones competenciales de ámbito autonómico, 'desplegar el Estatut'. "El conflicto político no es sobre transferencias. Cataluña quiere decidir libremente su futuro político, no es de otra índole competencial, esto era hace 10 o 20 años", concluía Aragonès.
"Su tiempo se está agotando, yo no tengo prisa", le dijo hace justo un mes el líder del ERC y condenado por sedición, Oriol Junqueras al presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, en una carta que envió desde su celda en la cárcel catalana de Lledoners y se mantiene el guión. Éste "no tenemos prisa" es el mensaje que sigue trasladando Junqueras a los suyos en plenas negociaciones con el PSOE a fin de no rebajar la presión y no precipitarse a garantizar sus abstenciones sin tener antes atado un compromiso con una mesa de negociación donde pueda estar el referéndum.
Las dos fechas marcadas en rojo: 19 y 21 de diciembre
Aunque ERC siga instalada en la fase de exigir prebendas, sabe que no está en condiciones de apretar demasiado porque no se quiere cerrar todas las puertas con el que podría ser, su futuro socio de Gobierno en Cataluña, al menos, a finales de este mes, para sacar adelante los presupuestos de la Generalidad. Todo dependerá de las intenciones del presidente catalán, Quim Torra, de apretar o no el botón rojo de un adelanto electoral antes de lo previsto, y de lo que decida en unas semanas Luxemburgo.
El Tribunal de Justicia de la Unión Europea decidirá el 19 de diciembre la cuestión prejudicial planteada por el Tribunal Supremo sobre la inmunidad de Oriol Junqueras tras haber sido elegido eurodiputado en las elecciones europeas del pasado 26 de mayo. Esta decisión es de tremenda importancia porque de ella depende también el futuro judicial del expresidente catalán, Carles Puigdemont.
Al haber huido de la justicia y no haber sido juzgados, de dictaminar el Tribunal europeo a favor de la inmunidad de Junqueras, tanto Puigdemont como su compañero de fuga, el exconsejero Toni Comín, gozarían de manera inmediata de la inmunidad que les corresponde como también europarlamentarios y podrían volver a España donde, aunque primero serían detenidos, después serían puestos en libertad al gozar de esa inmunidad pese a las euroórdenes dictadas por el magistrado del Supremo, Pablo Llarena.
De regresar a España, Puigdemont no dudaría en volver a postularse de nuevo como presidente de la Generalidad, y la campaña contra ERC en unas nuevas elecciones sería tan agresiva que los de Junqueras perderían toda esperanza de conseguir sus planes de asaltar el sillón presidencial en la Plaza Sant Jaume. La otra fecha clave para ERC será también el 21 de diciembre. Ese día se celebrará el Consejo Nacional del partido en Barcelona y no se tomará una decisión sobre la investidura antes de ese sábado.