Los familiares de Francisco Franco han hecho este viernes su primera visita al cementerio de El Pardo Mingorrubio donde desde el pasado 24 de octubre yacen los restos del dictador tras la profanación en la basílica del Valle de los Caídos.
Con motivo del día de Todos los Santos, Jaime Martínez Bordiú, nieto de Franco, acompañado de su pareja, ha visitado el cementerio para depositar unas flores rojas y amarillas en el interior del panteón donde reposan sus abuelos.
"Vengo a traer unas flores el día de Todos los Santos ya que está aquí el abuelo, vamos a dejar unas cositas", ha dicho el nieto de Franco que ha insistido en el malestar de la familia por no poder hacerlo en La Almudena, como era el deseo de la familia en caso de que se produjera la exhumación. Ha destacado que la puerta de Estrasburgo está abierta y que, por tanto, recurrirán ante la Justicia europea aunque "quién sabe lo que ocurrirá".
Lo harán para pedir llevar el cuerpo de su abuelo a la cripta de la catedral de Madrid porque "ese es el panteón familiar". "La Almudena no es que lo intentemos, yo ahora me voy a la Almudena a la tumba de mis padres, es el panteón familiar, esto es una tumba de Estado, esto no es nuestro, nuestro panteón está allí, lo compró mi madre al fallecer mi padre", ha afirmado.
Ha evitado pronunciarse sobre qué harán si el Tribunal Europeo de Derechos Humanos no falla a su favor y en tal caso optaran por adquirir el panteón de El Pardo, ahora propiedad del Estado. "No puedo hablar por todos mis hermanos, no lo sé", ha añadido.
Ellos no han sido los únicos en acudir a Mingorrubio, ya que varias personas se han desplazado al cementerio para rendir homenaje a Franco en el panteón donde reposan también los restos de su mujer Carmen Polo. Varios ciudadanos han dejado flores en la puerta, que sólo se ha abierto para los familiares.