El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha valorado desde Moncloa la sentencia del Tribunal Supremo sobre el golpe separatista. "Quiero reconocer la labor del Tribunal Supremo, que ha dado un ejemplo de autonomía y transparencia demostrando el funcionamiento de nuestro Estado de derecho", ha dicho el presidente felicitando a los magistrados en una declaración ante los medios en la que también ha expresado el "absoluto respeto y acatamiento del fallo", que "pone fin a un proceso judicial que se ha desarrollado con plenas garantías y transparencia".
En un mensaje que luego ha querido leer en inglés, Sánchez ha dicho que el fallo es "resultado del Estado social y democrático en España" y ha destacado aspectos como el respaldo que obtuvo la Constitución en Cataluña en 1978, el "alto grado de autogobierno" en Cataluña y la "inviolabilidad de la integridad territorial" española, cuya vulneración "está en la base de las acciones que han sido sancionadas".
"Se abre una etapa nueva", ha proclamado Sánchez antes de avisar de que su gobierno "se mantendrá atento" y garantizará "la seguridad y el respeto a la legalidad democrática", aplicando "la legalidad sin excluir ninguna posibilidad". También ha hablado de "proporcionalidad" y "unidad", "contando con la cooperación leal de todas las fuerzas políticas".
"Hoy concluye un proceso judicial ejemplar y se confirma el naufragio de un proceso político", ha continuado el presidente en funciones, que también ha pedido abrir una "etapa nueva" dejando de lado "los extremismos". En este punto ha citado la "patria común que es Europa" y ha mencionado las "exigencias medioambientales" entre los desafíos. "Vamos a asistir a los estertores de una etapa superada. Estamos convocados a una etapa nueva: la reconstrucción de la convivencia en Cataluña", ha concluido.