Según los datos del registro mercantil, Juan Antonio Marín Ponce, el padre de la familia implicada en los presuntos delitos contra la salud pública por el brote de listeriosis, era el gerente o administrador real de Magrudis, SL mientras que su hijo Sandro Marín era oficialmente el administrador y accionista de la empresa. Se sabe ahora el otro hijo, Mario Marín, era el administrador de otra empresa cárnica, vecina de la anterior y no declarada ante las autoridades municipales correspondientes de Sevilla.
La empresa se llama Elaborador Cárnicos Mario, SL, su administrador es Marío Marín, hijo y hermano respectivamente del gerente y del administrador de Magrudis SL y está situada en la nave 21 de la parcela 3 del Polígono El Pino, c/Pino Silvestre, de Sevilla. Magrudis, SL tiene su sede en Sevilla en el mismo polígono, en la misma calle, en las parcelas 31 a 3, nave 20. La cuestión esencial es que se ha conocido que esta empresa ni siquiera ha estado declarada a pesar de estar constituida en 2017.
Toda la prensa andaluza se hace eco hoy de la noticia adelantada por ABC según la cual había otra empresa de la familia implicada en el caso. Pero en este caso no estaba dada de alta en el Registro General Sanitario de Empresas y Alimentos como era de obligado cumplimiento. Naturalmente, la empresa no había sido inspeccionada por el Ayuntamiento de Sevilla, lo que ya había hecho sospechar a la Fiscalía.
Como ya es conocido, la Guardia Civil detuvo por orden judicial a los tres principales implicados ya mencionados en la operación que terminó con cinco detenidos, dos de ellos ya puestos en libertad y tres registros de domicilios.
La inquietante trayectoria empresarial de Juan Antonio Marín Ponce está plagada de irregularidades, deudas y comportamientos sospechosos. Hace 26 años fundó Sanmasur, SL, con CIF B41595216, dedicada a la producción de tortillas de patatas en un patio y que terminó su trayectoria con un crédito incobrable por sus propios trabajadores.
Oficialmente, aparece más tarde en otro negocio, Sierra Encina, SL, en 1996 que duró pocos años y luego en Embutidos El Patio, igualmente terminada en situación de insolvencia, como relaciona El Mundo.
Finalmente fundó Magrudis, SL, aunque no aparecía finalmente como administrador de la empresa, puesto que dejó a su hijo Sandro Marín cuando era estudiante. Magrudis, SL no tenía licencia de actividad, como ya de informó en su día, y estuvo funcionando 2 años, hasta 2015, sin registrarse en el Registro General Sanitario y afrontó obras de ampliación sin permiso.
Ante la evidencia de que la investigación y la responsabilidad por el brote infeccioso está pasando a los propietarios de las empresas mencionadas dejando de lado la responsabilidad de Ayuntamiento y Junta de Andalucía, el portavoz parlamentario de Vox, Alejandro Hernández, dijo ayer que si bien "hay una culpa inicial de la empresa" Magrudis, tanto "el Ayuntamiento tiene que asumir su parte de responsabilidad por una gestión ineficiente y, por otro lado, la Junta de Andalucía, pensamos que no estuvo a la altura".
Ante la repercusión del caso en el prestigio de los productos alimentarios andaluces, la consejera de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible, Carmen Crespo, subrayó ayer que el sector cárnico andaluz está "muy concienciado con la seguridad alimentaria", y que lo ocurrido con la empresa Magrudis SL es "una cuestión de una empresa puntual".
Mientras Adelante Andalucía insiste en que la asociación de consumidores Facua, ligada a la izquierda política, aporte sus datos en el Parlamento, Sergio Romero, portavoz parlamentario de Ciudadanos (Cs) ha defendido la gestión por parte del consejero de Salud y Familias, Jesús Aguirre, cuya dimisión lleva exigiendo el PSOE de manera insistente desde el principio del brote.
Romero añadió que en este tema no cabe "la tajada política, el electoralismo o el interés particular", por lo que ha hecho un llamamiento al resto de grupos para "ir todas a una". "Hace falta lealtad y colaboración", ha dicho, "tenemos que tender la mano porque si no lo hacemos le estaremos dando un mensaje erróneo a la ciudadanía".
Además, recalcó el apoyo del Gobierno andaluz y de Cs a los empresarios cárnicos y ganaderos, los más "afectados" del brote, mediante una Proposición No de Ley al tratarse de un sector "muy importante para la economía andaluza". En su opinión, se debe apoyar al sector afectado para que "no se manche el buen nombre y la buena gestión por culpa de quien lo hace mal".
La Consejería de Salud y Familia de la Junta no ha incluidos datos sobre la situación actual de los afectados desde el pasado día 23 pero ya consideraba entonces que el brote de listeriosis sigue en clara fase de remisión. El número de pacientes hospitalizados en estudio o con infección confirmada se ha reducido de forma sostenida, de tal manera que sólo quedaban 12 pacientes hospitalizados de los que sólo una es una mujer embarazada: la mayoría están en Sevilla (9, uno de ellos en la UCI), seguida de Cádiz (2) y Huelva (1).
Siguen detenidos los tres principales implicados y tanto la Fiscalía como la autoridad judicial tienen en marcha una investigación por la comisión de presuntos delitos, tras las denuncias y querellas presentadas tanto por Facua como por la Junta de Andalucía y el Ayuntamiento de Sevilla.