El tono les sigue delatando. En el inicio de una nueva reunión entre PSOE y Podemos, que ha comenzado pasadas las 11:00 en el número 36 de la Carrera de San Jerónimo, los negociadores socialistas y morados se siguen enfrascando en un fuego cruzado de acusaciones que revela las pocas esperanzas de ambas partes en lograr un acuerdo. Tras la falsa apariencia inicial de albergar esperanzas, los representantes de ambas formaciones han vuelto a enfrascarse en acusaciones mutuas y reproches ante la nula voluntad de que haya un pacto en torno a un gobierno de coalición.
A su llegada a la reunión, la vicepresidenta en funciones, Carmen Calvo, ha dicho ser optimista y ha confiado en "que podamos investir al presidente". Pero acto seguido ha lanzado el primer dardo: "Unidas Podemos están muy inflexibles, tienen que ser más flexibles pero tenemos que tener al presidente investido la semana que viene".
Su interlocutor en Podemos, Pablo Echenique, hizo lo propio al llegar al punto de encuentro en el Congreso y aseguró que acude a la nueva cita "con ánimo de dialogar" pero en torno a un gobierno de coalición" que "es lo que han votado los inscritos y es lo que hay en toda Europa y en todas las comunidades autónomas, parece lo más sensato". Una exigencia de retomar el gobierno de coalición como punto de partida en la que insistió el líder de la formación de los círculos en una entrevista en Carne Cruda.
Pablo Iglesias ha señalado: "Yo no aspiro a que nosotros resultemos simpáticos, caerle simpático a Carmen Calvo, a José Luis Ábalos o los dirigentes del PSOE. Yo aspiro a que dejen atrás el infantilismo y asuman que podemos ponernos de acuerdo en cuestiones que tengan que ver con el interés de España, porque esto no va de caerse bien. Espero que en el último momento sea responsable". Y ha añadido: "Si por el contrario entiende que una repetición electoral puede hacer que Casado y Rivera entren en el Gobierno, pues hombre, al menos que lo reconozca...".