Es una muestra inequívoca más de que Pedro Sánchez no tiene voluntad de llegar a un acuerdo con Podemos y despliega su estrategia a unas más que probables elecciones el 10 de noviembre. El presidente del Gobierno en funciones sigue sin cerrar la fecha de los contactos con los grupos políticos en aras de explorar la posibilidad de acuerdo y evitar la repetición electoral. "No hay nada agendado", dicen fuentes de Moncloa que dan largas a Podemos exasperando aún más a la formación morada y agotando la paciencia del propio Pablo Iglesias.
Un desdén a los encuentros políticos que contrastan con la diligencia con la que Moncloa aborda la comparecencia parlamentaria que Pedro Sánchez tiene prevista para dar explicaciones sobre los dos últimos Consejos Europeos. Según fuentes de Moncloa consultadas por Libertad Digital, el presidente tiene previsto comparecer en el Congreso el jueves 5 de septiembre, la primera semana del mes en que estaban previstos inicialmente los encuentros con los líderes políticos, entre ellos con su ‘socio preferente’ de Podemos.
El Gobierno no descarta incluso que pudieran posponerse esos contactos porque están a la espera de que haya un gesto de la formación morada, una rectificación que dé visos de apoyar "gratis" la formación de un Ejecutivo socialista que da por caducada la fórmula de un Gobierno de coalición. Ésa fue la apelación que realizó este martes la vicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo, a la llegada a la reunión de Pedro Sánchez con los colectivos LGTBI: "Hay otras opciones entre el blanco y negro que plantea Podemos. O coalición de gobierno o llevamos el país a unas elecciones. Esto no es lo que plantea el PSOE. El PSOE plantea cosas muy normales en otras democracias: queremos gobernar con los apoyos parlamentarios de otro grupo de izquierdas, con Unidas Podemos".
Una posibilidad ante la que el Gobierno alberga pocas o ninguna esperanza pero a la que deja abierta la puerta. Si hubiera algún movimiento en la formación de los círculos, se plantearían posponer la comparecencia de Sánchez al jueves 12 de septiembre. A cuatro semanas de la disolución de las Cortes el 23 de septiembre, el presidente del Gobierno en funciones decidió dedicar esta última semana de agosto a unos encuentros ‘temáticos’ con colectivos sociales que culminarán el viernes con un documento programático que muchos comparan con la elaboración de un programa electoral, que sigue exactamente los mismos procesos de interlocución con asociaciones afines.
Los socialistas siguen negando públicamente querer elecciones pero en sus intervenciones públicas se escapan algunas pistas sobre su inequívoco ánimo electoral. Así le ocurrió a la portavoz parlamentaria, Adriana Lastra, al anunciar hoy que el documento programático que pretende servir de base para una futurible negociación política se presentará "en los próximos días o semanas" cuando apenas quedan tres para la disolución del Parlamento y la convocatoria inmediata de elecciones.
Sea como fuere, el Gobierno ha dejado libre la agenda de 16 al 20 de septiembre, tercera semana de mes y a pocos dias de que se disuelvan las cortes el lunes 23 de septiembre ante la posibilidad de que hubiera que convocar una sesión de investidura in extremis. Últimas horas de una legislatura cuyo final se anticipa frenético y por la que muchos acusan al ejecutivo de pedro sanchez de dejar todo para el final, muestra inequívoca de su voluntad de ir a elecciones. Críticas ante las que las fuentes consultadas dicen con sorna: "Hay tiempo de sobra, de aquí al 10 de noviembre, hay tiempo de sobra".