El separatismo sospecha que Sánchez quiere ir a elecciones por su actuación contra la "acción exterior" catalana

El separatismo sospecha que Pedro Sánchez quiere repetir las elecciones generales y utiliza a la Generalidad como víctima propiciatoria para su arranque de campaña. Esa es la lectura que tanto Junts per Catalunya (JxCat) como ERC hacen del anuncio de la ministra portavoz en funciones, Isabel Celaá sobre el requerimiento para que la administración autonómica retire su Plan Estratégico de Acción Exterior.

Con ese requerimiento de incompetencia se abre un plazo de un mes para que la Generalidad retire tal plan. En caso contrario, el Gobierno podrá acudir al Tribunal Constitucional. En el gobierno regional se considera "casus belli" la acción del Ejecutivo, que a su vez entiende que el plan de la Generalidad excede con mucho las competencias autonómicas y presenta a la administración presidida por Torra como un sujeto internacional con categoría de Estado.

El ministro de Agricultura Luis Planas, que asumió las competencias del ministerio de Política Territorial tras el nombramiento de Meritxell Batet como presidenta del Congreso, ha puesto como ejemplo que el citado plan estratégico se refiere a los consejeros como ministros mientas que Celaá ha abundado en que el plan autonómico, presentado a finales de junio, invade la competencias estatales.

Reacción coordinada de JxCat y ERC

El presidente autonómico, Quim Torra, ha replicado al anuncio con el enésimo llamamiento a la confrontación con el Estado y emitido un mensaje en Twitter en el que vincula la reacción del Gobierno en funciones con la intención de la Generalidad de demandar al Gobierno por la financiación autonómica. "A la asfixia financiera denunciada ayer por el vicepresidente (Pere Aragonès) -que llevaremos a los tribunales- el Gobierno español hoy nos hace saber que quiere acabar ahora con la acción exterior catalana. No hay más camino que la confrontación democrática y la defensa de nuestros derechos sociales y políticos", ha trinado Torra.

El movimiento del Gobierno en funciones ha provocado también que ERC se haya mostrado en sintonía con Torra por primera desde hace muchos meses. Así, el consejero de "Exteriores", Alfred Bosch, del partido republicano, ha asegurado en la misma red social que la "acción exterior de Cataluña no sólo es legal y legítima, sino necesaria" y ha calificado de "arbitrariedad" a la que se enfrentarán la decisión del Gobierno.

El ejecutivo catalán teme por el despliegue de su red de "embajadas" (ha anunciado nuevas aperturas en Argentina, México y Túnez) y se malicia que Pedro Sánchez pretende repetir las elecciones generales y busca un choque con la Generalidad como instrumento propagandístico, Así, JxCat ha pasado de replantearse su voto en una hipotética investidura de Sánchez con una posible abstención a cambio de "diálogo bilateral" a temer la repetición de una convocatoria electoral. También en ERC se da por sentado que Sánchez busca el enfrentamiento con los nacionalistas como un aliciente de su campaña electoral.