El presidente del PP, Pablo Casado, ha afirmado este sábado en Vitoria que la "investidura incierta" de Pedro Sánchez podría cerrarse "de mala manera" y cree que el posible acuerdo entre PSOE y Unidas Podemos es una "simulación de novedad", ya que ambos partido "llevan pactando todo el mes" en gobiernos de diputaciones y comunidades autónomas.
Casado ha intervenido en la primera jornada de la Escuela de Verano Miguel Ángel Blanco que, organizada por las Nuevas Generaciones del PP bajo el lema "La España del futuro", se desarrolla a lo largo de todo el fin de semana en el museo Artium de Vitoria.
En su intervención, Casado ha hecho referencia a la "investidura incierta" del líder del PSOE Pedro Sánchez con el apoyo de Unidas Podemos para afirmar que existe la posibilidad de que pueda cerrarse "de mala manera".
Para Casado, lo que ha ocurrido "en las últimas horas" se trata de una "simulación de novedad" para que PSOE y Unidas Podemos hagan "lo previsible" y que los socialistas "puedan pactar con quien lleva pactando todo el mes, y pueda alcanzar un acuerdo de gobierno a nivel nacional con Podemos, como ha llegado en diez diputaciones y en siete comunidades autónomas, algunas ya firmadas y otras en trámite".
El líder del PP ha destacado que su formación ha conseguido alcanzar acuerdos "satisfactorios" en muchas comunidades autónomas y ayuntamientos, y se encuentran trabajando para "conseguir que, después de Murcia, se logre un entendimiento en la Comunidad de Madrid también pronto".
"Hemos pactado con ocho partidos en apenas unos meses –lo digo para aquellos que decían que somos un partido que no dialogaba y que estaba aislado– y hemos ofrecido once pactos de estado al PSOE para dar estabilidad a España", ha subrayado.
Casado cree que "la fractura y la polarización parece arrastrarlo todo desde hace demasiado tiempo", pero ve evidente que "el saldo en forma de estabilidad, gobernabilidad y regeneración institucional, está muy lejos de lo que algunos prometían".
La alianza del nacionalismo con la izquierda
Casado ha manifestado que el PP se construyó como "gran partido de España" y ha criticado las "manipulaciones" del nacionalismo que "siempre ha querido hacer de la foralidad la base de un derecho a la secesión", cuando "la foralidad está en el lado de la ley, opuesta al nacionalismo".
Asimismo, ha destacado que en la Constitución de 1978 "por primera vez se respeta y ampara la foralidad" y ha defendido que "no hay, porque no puede haberlo, fuero sin Constitución, y mucho menos contra la Constitución".
También ha criticado que los nacionalistas quieran imponer que "para ser vasco hay que ser nacionalista", y cree que nos encontramos en un momento "de alto riesgo" porque "el nacionalismo está muy fuerte por su alianza con la izquierda".
"Nosotros vamos a decir que no, porque ser vasco no es ser nacionalista, y si permitimos que sobre esto exista la más mínima sombra de duda, estaremos perdidos. Da igual que tengamos que decirlo en solitario. No vamos a aceptar las presiones de una imposición hegemónica del nacionalismo que está incondicionalmente alineado con la izquierda, siempre contra el PP", ha indicado.
Casado ha criticado el nacionalismo del PNV que "todavía presume de ser fiel a la palabra dada, pero que una semana después de apoyar los presupuestos del gobierno del PP, apoyó la moción de censura para acabar con él". "Es un nacionalismo que busca hacer de Navarra ahora su frente de desestabilización entre la complicidad del PSOE", ha insistido.
"Este es un momento de muy alto riesgo porque quienes sufren este proyecto agresivo ven que el nacionalismo está muy fuerte precisamente por su alianza con la izquierda", ha avisado Casado.
El líder del PP ha defendido que su partido "integra hacia dentro y hacia fuera" y ha subrayado que quiere integrar a una "mayoría plural de españoles". "El País Vasco sigue siendo una parte esencial de nuestro proyecto. Desde su singularidad debe añadir valor a la suma, sin confundir singularidad con desmarque", ha defendido.
Alonso: "Los vascos del PP son muy de Casado"
El presidente del PP vasco, Alfonso Alonso, por su parte, ha reconocido que los vascos del PP son "muy suyos" porque tienen una historia que "no es corriente" y ha defendido que para formar parte del partido "había que tener bastante carácter". "Somos muy nuestros. A la gente se le puede hacer raro porque tienen una lengua distinta y somos muy celosos de nuestras instituciones y tradiciones como la foral, algo que suena muy raro ahí fuera, pero que para nosotros es muy importante", ha subrayado.
Alonso ha defendido que la foralidad es "la manera en la que se tiene que articular el juego de lealtad y cohesión" entre el País Vasco y el conjunto de España "como ha sido siempre". También ha insistido en que los vascos del PP son "vascos que defienden a España, que dan la cara y creen en la libertad".
No obstante, ha aclarado que los vascos del PP "son muy" de Casado, porque "le necesitan" y creen que el presidente del PP "encarna la alternativa política que necesita España", no solo para el PP, sino "para una mayoría de españoles que quieren mirar al futuro con esperanza".