El comisario José Villarejo ha asegurado al juez que realizó misiones secretas como agente encubierto para el PSOE de Felipe González. Villarejo permanece en prisión provisional en la madrileña cárcel de Estremera desde noviembre de 2017, tras ser encarcelado en el marco de la Operación Tándem.
En un escrito, al que han tenido acceso esRadio y Libertad Digital, remitido desde prisión al titular del Juzgado Central de Instrucción nº 6 de la Audiencia Nacional, Manuel García Castellón, el comisario sostiene que en enero de 2018, a requerimiento de la Fiscalía, pudo "declarar para así alertar de nuevo del riesgo de que se filtraran datos que podrían afectar a los intereses de España, especialmente en el extranjero. Fui interrumpido en mi testimonio por la propia Fiscalía, hecho insólito, ya que estaba reconociendo actuaciones que los diferentes gobiernos, tanto del PSOE como del PP me habían ordenado, desde que regresé como agente encubierto al Ministerio del Interior en 1993".
"Aunque con el PSOE en el Gobierno", añade, "el CNI dependía del Ministerio de Defensa, al llegar el PP en 2011, con la confirmación de su mandato, por presión de la Corona, consiguió además depender de la Vicepresidencia con lo que aumentó, aún más, su influencia. En muy poco tiempo, Sanz Roldán (Félix San Roldán), militar jubilado que años atrás el PSOE rescató del retiro para poner orden a un CNI enfrentado al último director civil por las cuestiones del atentado del 11-M que ya expuse en mis escritos anteriores, supo reconducir la situación y controlar todo el poder político, al tiempo que ambicionaba el control absoluto de la Información".
En el extenso escrito con fecha de 21 de mayo, Villarejo enumera las "misiones" secretas que habría realizado para el Gobierno socialista de Felipe González, que permaneció en el poder entre 1982 y 1996. También alude a otras operaciones efectuadas para el Ejecutivo del PP de Mariano Rajoy: "Negarán por tanto que organicé en Uruguay una estructura para suministros de bebidas a los restaurantes de ETA, en la década de los 80, por petición del PSOE y que capté a técnicos de Telefónica de Cuba para obtener las conversaciones de los etarras, todo ello, aunque estaba excedente y no tenía ningún vínculo oficial".
"Negarán todos los trabajos que hice tanto en Sudamérica, como en Francia e incluso en España, interviniendo comunicaciones que, de no haberse conocido, hubieran provocado numerosos atentados y que por esos trabajos, estando excedente y sin compensación de ningún tipo, me pidieron en 1993 volver a constar como miembro activo de la Policía, sólo a efectos operativos y prácticos para validar mis informes", afirma el comisario encarcelado.
Sobre terrorismo yihadista afirma: "Negarán que gracias a la información que me suministró Abbu Abas (terrorista palestino) se evitaron numerosos atentados en Europa, especialmente en Francia y al recuperar una maleta construida con un explosivo no detectable entonces, obtuvimos en 1994 el reconocimiento mundial. Negarán años después, los viajes que realicé a Somalia, al Líbano, a Irán, a Afganistán, Arabia Saudí, Siria, Sierra Leona y tantos otros lugares para conseguir informaciones que permitió a España una situación de privilegio sobre terrorismo islamista. Negarán las gestiones realizadas en el mundo árabe en general para conocer y/o en la medida de lo posible evitar actos terroristas contra los intereses españoles".
También apunta misiones contra el narcotráfico gallego y a favor de importantes empresas españolas: "Negarán los trabajos de infiltración en los círculos íntimos de Oubiña (Laureano Oubiña), Pablo Vioque y otros que además de sus capturas, permitieron desmantelar importantes estructuras de droga. Negarán los trabajos de Inteligencia en operaciones como Malaya, Astapa, Brugal y tantas otras de similar importancia. Negarán todas las ayudas prestadas a empresas del IBEX-35, en concreto, en momentos de especial vulnerabilidad en el extranjero por la convicción que eran los intereses de España los que estaban en riesgo, frente a potencias extranjeras".
Según el comisario, evitó el boicot a una central nuclear española por parte de espías y rusos: "Negarán las ayudas, por ejemplo, prestadas a CASA, evitando que fuera acusada de pagar comisiones a cambio de tener pedidos de aviones o cuando fui requerido para descubrir en la Central de Almaraz, los espías que boicoteaban su funcionamiento, siguiendo instrucciones de Rusia".
"Mi admirado Alfredo"
El comisario José Villarejo además hace referencia en su escrito a la denominada Operación Cataluña y a la amiga "íntima" del Rey Juan Carlos, Corinna: "Negarán los trabajos de Inteligencia que permitieron en 2012 al menos retrasar las estrategias independentistas en Cataluña, auspiciadas por el entorno de los Pujol".
"Lamento", añade, "que toda esta actividad se esté ocultando para así poder oprimir mis aspiraciones a contar lo sucedido y todo por el capricho de Sanz Roldán, que con ello pretende eludir el gravísimo daño que ha infringido a la Corona por su más que desafortunada actuación contra la princesa Corinna".
Por último, alude de forma enigmática al recientemente fallecido ministro del Interior socialista, Alfredo Pérez Rubalcaba: "Por más que intenten forzar mi frágil salud, esperando un final próximo como el de mi admirado Alfredo, tengan por seguro que mi mente se mantendrá firme hasta el final".