La sede del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) ha sido este martes el escenario de la primera reunión de trabajo que ha contado con Paz Esteban como directora en funciones de los servicios secretos. El general de Ejército Félix Sanz Roldán acabó su mandato el viernes y la ley no le permite estar en interinidad hasta la designación de su sucesor. De igual forma, un Gobierno en funciones tampoco puede nombrar a un director del centro.
La reunión ha estado encabezada por la ministra de Defensa, también en funciones, Margarita Robles, de la que dependen orgánicamente los servicios de inteligencia, y ha tenido lugar en la sala Irak del centro, un nombre que recibe en recuerdo de los agentes españoles fallecidos en acto de servicio en ese país asiático, la gran mayoría de ellos en el ataque de Latifiya, que tuvo lugar en noviembre de 2003.
Al término del encuentro, Robles ha comparecido antes los medios de comunicación para lanzar un mensaje claro y sobre el que ha insistido una y otra vez. Tanto la ministra como la directora del centro (hasta el viernes secretaria general y número dos) están en funciones, pero esta situación no afecta a los agentes del servicio de inteligencia, que siguen realizando su trabajo con la misma intensidad de siempre.
"Este centro nunca está en funciones, no baja la guardia. Continúa trabajando con absoluta normalidad. Los españoles pueden estar tranquilos, no hay interinidad. Los más de 3.000 hombres y mujeres del CNI trabajan en temas de muchísimo calado. Siguen trabajando en prevenir y combatir las posibles amenazas. Actúan en función de la Directiva Nacional de Inteligencia que aprueba el Gobierno cada año", ha dicho la ministra.
Según ha añadido, el hecho de que el Gobierno esté en funciones o que los presupuestos que maneja estén prorrogados no afecta en ningún momento a la operatividad de los servicios secretos españoles, es decir, al "trabajo callado y silencioso" que lleva a cabo a diario "en lugares muy distintos del mundo".
Por otra parte, la directora en funciones del CNI, Paz Esteban, ha destacado que "es un honor, un compromiso y una responsabilidad" asumir el mando del centro y que su objetivo principal es que en los servicios secretos se "siga trabajando con normalidad", tras lo que ha señalado que en ese sentido "la sociedad puede estar tranquila".