El ‘no es no’ de Albert Rivera a Pedro Sánchez no cambia tras conocerse la fecha del debate de investidura, el próximo 23 de julio. La negativa, incluso, se extiende a la posibilidad de entrevistarse con el presidente del Gobierno en funciones, como dejaba meridianamente claro el líder de Ciudadanos pocos minutos después de que la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, anunciase el día del debate para la investidura.
Pablo Casado, en cambio, sí que acudirá a esa ronda de contactos cuando le llame Pedro Sánchez ya que, según ha explicado en el Congreso, "siempre acudiré cuando un presidente del Goberino me pida reunirme con él. Es mi obligación, va en el sueldo". Eso sí, el presidente del PP le ha recordado al líder del Ejecutivo que "los esfuerzos inútiles conducen a la melancolía".
"Nada más que hablar"
"Es que no tengo nada más que hablar de las tres veces que he hablado con Sánchez. Tiene que formar gobierno con sus socios, como es lo lógico en todos los países del mundo" afirmaba Rivera al ser preguntado por la prensa en las dependencias de Ciudadanos en el Congreso, donde se reunía con el presidente de UPN, Javier Esparza, para firmar un acuerdo por el que se pide al PSOE que facilite el Gobierno en Navarra de la coalición que integra la formación foral con el PP y Ciudadanos.
Rivera acusa a Sánchez de no estar cumpliendo con el encargo que le hizo el Rey. "Tiene una mayoría posible, lo que pasa es que tiene que ponerse a trabajar, no le van a hacer el Gobierno los demás, tendrá que hacerlo él" aseveraba, al tiempo que acusaba al presidente en funciones de estar "bloqueando" España con "la ayuda de Batet, que ahora tira la pelota hasta el día 23, cuando podía haber sido mucho antes".
Rivera pedía, además, en línea con un escrito presentado este lunes por su grupo, que los plenos parlamentarios arranquen cuanto antes, incluidas las sesiones de control al Gobierno, que según avaló el Tribunal Constitucional en 2018 pueden celebrarse aunque el Ejecutivo esté en funciones. Una resolución del Alto Tribunal que supuso un varapalo para el Gobierno de Mariano Rajoy y un espaldarazo a las posiciones que durante el bloqueo de 2016 defendieron el resto de grupo, incluidos PSOE y Ciudadanos, como recordaba el presidente del partido naranja. "Ganamos una sentencia, por cierto, conjuntamente con el PSOE frente a Rajoy, que dice que el Congreso tiene que controlar al Gobierno" concluía.
Casado pide a Sánchez que rectifique
Por su parte, Casado también ha afeado a Sánchez que en los últimos dos meses, "no he escuchado ni una propuesta de futuro". Declaraciones que hacía tras reunirse con el líder del UPN, Javier Esparza. En una comparecencia en el Congreso, el presidente del Sánchez que "rectifique" y abogue por una investidura basada en un acuerdo con la coalición Navarra Suma y no con la influencia de Bildu.
"Pedro Sánchez todavía puede rectificar, llegar a un acuerdo de gobernabilidad en Navarra y aceptar una abstención o el 'sí' con Navarra Suma para facilitar la investidura, porque la suma le da", ha explicado. "Si no, Pedro Sánchez estaría ofendiendo a las víctimas", ha afirmado el líder del PP que ha insistido que él no teme unas nuevas elecciones.