El Ayuntamiento de Cadrete, liderado por la popular María Ángeles Campillo, con el apoyo de Ciudadanos y Vox, ha decidido retirar el busto de Abderramán III, situado en la plaza de Aragón del municipio zaragozano, una actuación que ha sido criticada por CHA e IU, que considera que la medida se ha tomado por orden del concejal de Vox y primer teniente de alcalde, Jesús García Royo.
IU ha comentado que esta es la primera actuación del concejal, que "ni siquiera ha esperado a la celebración del pleno de organización y a la toma de la delegación de la Alcaldía", según ha señalado la coordinadora de IU en Cadrete, María Ángeles Mercader. Para la representante de IU, la actuación del concejal de Vox responde a una "gravísima e intolerable actitud racista y de odio" y ha indicado que la estatua que se ha retirado este martes es una réplica de la donada a Cadrete por el escultor turolense Fernando Ortiz Villarroya.
Mercader ha advertido de que la "inquina" hacia esta estatua "por gente del entorno de los partidarios de Vox ha hecho que en dos ocasiones la estatua haya sido vandalizada". La primera vez fue arrancada con una eslinga, "hecho del que se vanagloriaron en redes sociales muchos partidarios de este grupo político" y en la segunda ocasión volcaron un bote de pintura roja sobre la estatua, ha relatado.
El califa cordobés Abderramán III acampó con sus tropas el 9 de octubre del año 935 frente a la fortaleza de Cadrete con el fin de preparar el asedio a Zaragoza y doblegar a la familia de los Tuyibíes que se habían sublevado contra el Califato de Córdoba.
La alcaldesa defiende el traslado
María Ángeles Campillos (PP), ha defendido este martes el traslado del busto de Abderramán III al Centro de Interpretación del Castillo. En declaraciones a Europa Press, Campillos ha explicado que el equipo de gobierno ha decidido retirar el busto de la plaza y colocarlo en el centro de interpretación, recordando la "polémica y la división que generó su colocación en esta plaza emblemática del municipio".
Para zanjar esa polémica, han acordado llevar el busto al centro de interpretación, que lo acogerá hasta que finalicen las obras de rehabilitación del castillo, que están en su segunda fase, y donde se situará finalmente. Aunque el califa fuera quien ordenara construir la fortificación de Cadrete, "nos parece que su figura a otros niveles de conquistas, luchas, represalias a los vencidos o a las mujeres no puede ser objeto de un reconocimiento tan importante como colocarlo en la zona más representativa del municipio", explicó la alcaldesa.
Además, ha recalcado que si todos los vecinos hubieran estado a favor no se llevaría a cabo este cambio, pero "más de la mitad del municipio estaba en contra y el error fue colocarlo sin hacer caso de las quejas". "El sitio más apropiado para el busto es el castillo", ha manifestado.
Campillos ha recordado que hace cuatro años perdió la Alcaldía, pero en su anterior mandato "conseguimos una subvención de un millón de euros para el castillo y el siguiente gobierno destinó 6.000 euros a este busto, que podrían haberse dedicado al castillo o a actividades culturales". A pesar de que "se han incendiado las redes por las críticas de IU y CHA", la alcaldesa ha asegurado que en Cadrete los vecinos han vivido este cambio "con absoluta tranquilidad y normalidad".