La Audiencia Nacional quiere iniciar el juicio contra el exmayor de los Mossos d'Esquadra, Josep Lluís Trapero, por rebelión el próximo mes enero. Según las fuentes consultadas por esRadio y LD, la fecha del juicio "no se fijará hasta conocer la sentencia del Tribunal Supremo sobre el referéndum ilegal del 1 de octubre", prevista para los meses de septiembre u octubre. Trapero será juzgado por los altercados del 20 y el 21 de septiembre, y por el 1-O.
En febrero, la Audiencia Nacional decidía en la vista de cuestiones previas mantener la competencia para juzgar a Trapero junto al exdirector de los Mossos, Pere Soler, y el ex secretario general de Interior catalán, César Puig. Los tres fueron destituidos el 27 de octubre de 2017, tras la aplicación del artículo 155 de la Constitución.
También se sentará en el banquillo de los acusados por un delito de sedición a la intendente de los Mossos, Teresa Laplana, que estuvo presente en el asalto a la Consejería de Economía del 20 de septiembre de 2017, en el que la secretaria judicial del Juzgado de Instrucción nº 13 de Barcelona tuvo que abandonar el edificio por la azotea.
Estas mismas fuentes apuntan que la fecha del juicio contra Trapero "depende únicamente del fallo del Supremo sobre el referéndum ilegal del 1 de octubre y que en ningún caso se fijará antes de que se haga pública la sentencia". Tras conocerse el fallo, se podría anunciar la fecha del inicio para unos meses más tarde. "Como muy pronto en diciembre y seguramente para enero, para no tener que suspender la vista por las vacaciones de Navidad", aseguran.
En este contexto, se recalca que "no hay ningún acusado en prisión provisional" y, por tanto, no hay tanta prisa por iniciar la vista oral. No obstante, el juicio se prevé largo y complejo, aunque obviamente no será comparable con las 52 sesiones y 4 meses de duración de la causa del Supremo.
La declaración de Trapero en el juicio del 1-O
Josep Lluís Trapero declaraba el pasado 14 de marzo como testigo en el juicio sobre el 1-O en el Supremo. Durante su comparecencia, afirmaba que él mismo advirtió al entonces presidente de la Generalidad, Carles Puigdemont, de que la celebración del referéndum ilegal del 1-O podría acarrear "problemas de orden público y de seguridad ciudadana". Una advertencia que aseguró habría realizado durante la Junta de Seguridad del 28 de septiembre del 2017, días antes de la celebración del referéndum ilegal.
El exmayor de los Mossos decidía declarar a pesar de su procesamiento por rebelión en la Audiencia Nacional, asistido por su abogada Olga Tubau. Trapero desveló que los Mossos prepararon un dispositivo para detener a Puigdemont y su Gobierno, sólo dos días antes de que realizarán la Declaración de Independencia en el Parlamento catalán el 27 de octubre.
Según su relato, llamó al fiscal superior de Cataluña y al presidente del TSJC: "Les comento que el cuerpo está a disposición tanto de la Fiscalía como del órgano judicial. Desconocíamos la trascendencia jurídica y qué delitos podía haber, pero veíamos que tenía cierta gravedad, y nos poníamos a disposición por si había que hacer un operativo". "¿Un operativo para qué?", preguntaba el abogado de Joaquim Forn, Xavier Melero. "Para la detención del president y los consellers", respondió Trapero.
A preguntas del fiscal, Trapero afirmó que Forn "tenía claro qué iba a hacer el cuerpo", en esa jornada y que algunas de las declaraciones del entonces consejero de Interior "sentaron mal" y motivaron emitir un comunicado al cuestionar que los Mossos no fueran a cumplir el madanto judicial del TSJC. "Pienso que había un punto de irresponsabilidad, pero el cuerpo tiene la fuerza que tiene", añadió. También apuntó Trapero que él informaba a Forn de todas las órdenes del Fiscalía.