La Policía Nacional blindará Madrid durante este fin de semana. La final de la Liga de Campeones y la presencia en la misma de dos equipos británicos, cuyas aficiones son conocidas en toda Europa por sus brotes de violencia descontrolada, ha obligado a diseñar un dispositivo de seguridad que intente garantizar en la medida de lo posible que el espectáculo deportivo pueda llevarse a cabo sin incidentes que lamentar.
En términos cuantitativos serán más de 4.200 agentes los que participarán en el mismo. Gran parte de ellos serán efectivos especializados en seguridad ciudadana y el grueso serán efectivos de las Unidades de Intervención Policial (UIP), los conocidos popularmente como antidisturbios. Junto a ellos se desplegarán también los agentes de las Unidades de Prevención y Reacción (UPR) o de la Brigada Móvil, que realizarán funciones de control y refuerzo en el transporte público
También habrá equipos especializados de guías caninos con perros adiestrados para la detección de explosivos; agentes especializados de la sección de Subsuelo y Protección Medioambiental, que controlarán las alcantarillas de la ciudad y harán requisas periódicas en zonas calientes; a varias unidades de la Sección de Caballería, que realizarán labores de prevención en grandes espacios con una importante cantidad de aficionados.
El dispositivo se va a completar con los agentes del Servicio de Medios Aéreos, que serán los encargados de controlar la situación desde el aire (helicópteros) y emitir imágenes en tiempo real de lo que está sucediendo a los centros de control y supervisión establecidos. Por primera vez en este tipo de eventos, se empleará también un sistema fijo de detección de drones o RPAS (sistemas remotamente tripulados), sistemas de neutralización y un dron cautivo.
El sistema de detección fijo dará situación de los posibles RPAS que sobrevuelen las zonas donde se celebrará el partido. El dron cautivo consiste en un RPA que aumenta su autonomía mediante un cable conectado a la unidad de control. Se instalará en los aledaños del estadio al objeto de obtener imágenes con los dos cámaras que porta –una gran angular y otra térmica– que serán remitidas al centro de control en tiempo real.
Tres círculos de seguridad
En el estadio, el dispositivo de seguridad establecido por la Policía Nacional se divide en tres círculos de seguridad. En el más exterior se restringe el tráfico rodado a vehículos que no tenga acreditación o sean vecinos de la zona, situando sistemas de interposición y bloqueo para evitar ataques mediante vehículo lanzado. El segundo círculo se establecerá mediante vallado físico con el fin de crear una zona segura alrededor del estadio. Será necesario poseer un título físico que permita acceder el partido para poder traspasar el filtro, siendo realizado un primer cacheo de seguridad.
Finalmente, el círculo más inmediato lo constituye las propias puertas del estadio Metropolitano donde será necesario validar la entrada o título de acceso para poder acceder. Allí se realizará a los espectadores un nuevo registro para verificar el cumplimiento de lo establecido en la normativa vigente, controlando expresamente que no se introduzcan al estadio objetos prohibidos.
Fan Zones y UEFA Champions Festival
Las distintas unidades y grupos policiales también se desplegarán por los numerosos puntos de encuentro. Además del Estadio Metropolitano, pondrá en marcha diversas actuaciones preventivas y disuasorias para crear un ambiente de seguridad en las dos Fan Zones situadas en la Plaza de Colón (Tottenham) y en la plaza de Felipe II (Liverpool). Estas áreas, situadas fuera del perímetro de seguridad, se ofrecerán a los aficionados un conjunto de actividades festivas.
El dispositivo también incluirá todos los actos que la UEFA ha organizado en los días previos al partido. La UEFA Champions Festival se desarrollará en cuatro escenarios situados en el centro de la capital como son la Plaza Mayor, Sol, Callao y la Plaza de Oriente, lugares que acogerán actuaciones musicales, exposiciones o partidos de exhibición. En todas esas zonas, y durante todas las jornadas, la Policía establecerá dispositivos de control de masas y en materia antiterrorista.
El despliegue también englobará los hoteles que acogen tanto a los dos equipos de fútbol como a los árbitros y a las distintas delegaciones de VIP o patrocinadores. En esos lugares se establecerá un dispositivo propio de protección, siendo escoltados en todos sus movimientos, e incluye requisas periódicas por guías caninos y agentes de subsuelo/protección mediambiental, medidas que se mantendrán en los desplazamientos hasta el campo de entrenamiento situado en Valdebebas.
El transporte público también será reforzado, especialmente las líneas de metro y autobuses que soportarán principalmente los movimientos relacionados con el partido, como la L2 y la L5, y que estarán cubiertas por agentes pertenecientes a la Brigada Móvil. También aumentará la presencia policial en estaciones de transporte y en el aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas, a fin de facilitar el masivo flujo de aficionados que se trasladen hasta la capital.