La Plaza del Ayuntamiento de Miravalles (Vizcaya) ha amanecido este jueves llena de octavillas en contra de Ciudadanos, PP y VOX, a los que se tilda de "fascistas" y con pancartas señalando a Albert Rivera, quien acompañado de la número dos naranja a las elecciones europeas, Maite Pagazaurtundua, del secretario general de Ciudadanos, José Manuel Villegas, y del diputado Edmundo Bal, homenajeará este mediodía a las víctimas de ETA en la localidad natal de Josu Ternera. Junto a las pancartas descritas, se pueden ver también algunas pidiendo la liberación del que fuera jefe de la banda terrorista, detenido la semana pasada en Francia tras diecisiete años fugado de la Justicia.
Este miércoles, el consistorio, gobernado por el PNV y en el que el único grupo de la oposición es EH Bildu, calificaba de "provocación" el homenaje a los asesinados por Ternera, entre ellos media docena de niños. Ciudadanos, por su parte, denuncia la existencia desde ayer de pasquines en los que se insta al boicot del acto –será un paseo y unas declaraciones a los medios de Rivera y su comitiva– bajando las persianas de comercios y viviendas y con una concentración alternativa, así como haciendo sonar cacerolas desde los balcones. Además, los vecinos han colocado lazos amarillos, símbolo del golpe de Estado en Cataluña. Es decir, lo mismo que ocurrió el pasado otoño en la localidad navarra de Alsasua y en la campaña de las generales en Rentería (Gipúzcoa) y que fue denunciado por Ciudadanos ante la Fiscalía, por considerar que era Bildu, la coalición en la que se integra Sortu, el partido de Arnaldo Otegi, la que a través de sus organizaciones juveniles había orquestado el boicot.