
Los barones de su partido le pedían "autocrítica" y "volver al centro", y Pablo Casado, en su discurso en el Comité Ejecutivo Nacional del Partido Popular, ha tomado la decisión de virar en su estrategia de cara a las próximas elecciones del 26 de mayo. Lo ha hecho calificando a Vox de "ultraderecha" y "extrema derecha", y presentando el lema: "Centrados en tu futuro" para esa cita con las urnas de dentro de un mes.
El líder de los populares no se había referido antes con estos términos a los de Santiago Abascal. Primero, ha llamado "ultraderecha" a Vox a puerta cerrada en la reunión de la dirección del partido que ha durado más de tres horas y en la que han intervenido más de una decena de cargos de la formación. Y después, ya en público, ha dicho que "Vox es la extrema derecha".
Palabras que pronunciaba después de que Juan Manuel Moreno Bonilla, presidente andaluz, a su llegada a Génova 13 asegurara que "en política, uno tiene que poner un pie un poquito más a la derecha y a veces, un poquito a la izquierda pero nunca mover del centro una de las piernas". Desde Galicia, Alberto Núñez Feijóo, pedía también "ensanchar el partido".
Para Casado, su cambio después de estos mensajes no supone contradicción ya que "ocupar el centro no es cambiarse de sitio, es simplemente cobijar a más gente, ampliar ese espacio para más gente". Por ello, ha dicho, "no creo que haya habido un giro a la derecha". Aunque en la reunión sí que se ha hablado un "reposicionamiento" de cara a las próximas elecciones del 26 de mayo, optando por la "centralidad".
Errores
Tras el peor resultado de la historia del PP, perdiendo más de la mitad de sus escaños en el Congreso, la cúpula popular ha concluido que la estrategia de no confrontar con Vox y Ciudadanos durante la campaña no ha sido la correcta, que mientras Casado estaba pensando en no atacarles para poder repetir el pacto que se dio en Andalucía, ellos dos tenían la mirada puesta en un futuro más lejano y en la lucha por ser el partido hegemónico en la oposición del PSOE.
"No supimos ver que nosotros estábamos dirigiéndonos a Pedro Sánchez y eludiendo cualquier contestación a Vox y a Ciudadanos sin darnos cuenta de que su adversario era el PP", ha comenzado explicando un Pablo Casado que ha negado que se haya producido un "giro a la derecha".
"Después de estos resultados, es falso que haya tres derechas. Sólo hay un partido de centro derecha, que es el PP. Hay otro partido de extrema derecha, que es Vox, y hay otro partido socialdemócrata disfrazado de liberal que es Ciudadanos", ha explicado Casado en rueda de prensa. No ha dejado ahí los ataques. A Abascal le ha recordado que ha "vivido" del PP y "de lo que ahora llama chiringuitos y mamandurrias autonómicas hasta hace poco". "No hemos hecho ningún insulto. Hemos descrito situaciones y hechos que omití en campaña para propiciar el pacto. Estar en la extrema derecha del panel es algo que llevan muy a gala en Vox", ha continuado.
En el PP ven ahora como tenderle la mano a Vox para entrar en un Gobierno en una entrevista en esRadio el último día de campaña fue un error y a partir de ahora ya "no van a poner la otra mejilla como hasta ahora".
Ante los suyos, Pablo Casado ha subrayado que ha "tomado nota" del mensaje que cree que han mandado los votantes, "que quieren un partido reconocible en sus principios y valores" y ha repetido que el resultado de las elecciones generales "fue muy malo" y que "hace falta reconstruir el partido piedra a piedra" después de unos años "complicados".