Tan sólo tres kilómetros separaron los actos de cierre de campaña del Partido Popular y de Vox en Madrid. Mientras que los de Santiago Abascal se dieron cita en la Plaza de Colón, los de Pablo Casado eligieron el Palacio de los Deportes de la capital de España.
Desde allí, el líder del PP aseguró ante 10.000 personas que "siempre nos dan por abatidos, siempre nos tratan con desprecio, siempre niegan nuestros éxitos, siempre amplifican nuestros errores, siempre van a poner la lupa en aquello que pueda dividir a la sociedad española. Por eso, somos la única garantía para el futuro de la nación".
Casado, que se presentó como el líder de un PP que "siempre ha estado, está y estará en el centro", pidió que voten "al PP porque solo nosotros podemos encabezar esa ola de cambio". "Tenemos que pensar el voto con la cabeza, tener a España en el corazón, por supuesto, pero pensar las razones que tienen que hacer que nuestro futuro este garantizado", insistió para pedir el "voto unido" para sacar a Sánchez de la Moncloa.
"Os pido que salgamos de aquí confiados, pisando muy fuerte y con la cabeza bien alta", dijo en el escenario del Palacio de los Deportes de Madrid. Esta fue su meta después de haber recorrido desde que llegó a la presidencia del Partido Popular 140.000 kilómetros. "A ganar, a ganar y a ganar", añadió un Pablo Casado que estuvo acompañado en el escenario por su candidata por Barcelona, Cayetana Álvarez de Toledo, y por el secretario general del partido, Teodoro García Egea.
Álvarez de Toledo y García Egea
La número uno del PP por Barcelona se subió al escenario y levantó el aplauso del público en abundantes ocasiones durante su discurso como cuando hizo que le acompañara a su lado Leopoldo López padre y tuvo un recuerdo para su hijo en Venezuela.
Álvarez de Toledo tuvo críticas para Pedro Sánchez: "Ese hombre con tantos atributos como escrúpulos", pero también para Rivera y Abascal. "Dejemos que Cs crezca en paz porque experimenta los trastornos de la adolescencia", comenzó. "Cuando lleguen a la vida adulta les dedicaremos algo mas de tiempo", dijo sobre los naranjas para después ir a por Vox: "En realidad no es un partido de derechas, se parece a la izquierda porque actúa contra la realidad". "Es la irresponsabilidad de la utopía, es el partido fácil", sentenció para después presentar al PP como el partido del "respeto".
Críticas a Vox y a Ciudadanos a las que se sumó Teodoro García Egea. El secretario general de los populares pidió no dejarse "engañar por la nueva política" y animó al auditorio repitiendo una de sus frases más aplaudidas tras la marcha de Ángel Garrido a Ciudadanos: "El plástico, al contenedor amarillo; y el político sin principios, al contenedor naranja".