Torra denunciará la quema del Judas Puigdemont en Coripe

Como sucede todos los años, el municipio sevillano de Coripe ha puesto fin a la Semana Santa con la fiesta de la quema del Judas, un monigote que representa "lo negativo para la sociedad" y que este año ha representado al expresidente fugado Carles Puigdemont.

La fiesta, declarada de Interés Turístico Nacional, comienza con la procesión del Cristo Resucitado y culmina cuando el Judas es llevado a la plaza acompañado por los escopeteros, la banda de música y cabezudos.

La figura lucía su típico peinado, traje oscuro, un lazo amarillo y una estelada como capa, y tras ser colgado de una higuera colocada junto a la Iglesia para la ocasión, ha sido tiroteado con munición de salva y finalmente se ha quemado ante los vítores de los centenares de personas que acudían a la celebración.

La fiesta, declarada de Interés Turístico Nacional, ha ofendido profundamente al separatismo y el Gobierno de Quim Torra y JxCat preparan sendas denuncias por la quema del muñeco Puigdemont, al considerar que podría ser constitutivo de un delito de odio.

"Sencillamente hórrido. Asco extremo. Intolerable. Lo denunciaremos" ha escrito el presidente catalán, Quim Torra, en su perfil de Twitter, que obviamente no muestra la misma sensibilidad cuando la CUP quema fotos del Rey durante la Diada o se apalea y tirotea a españoles en el carnaval de Solsona.

"Hoy en un pueblo de España, gobernado por el PSOE, ha decidido fusilar y quemar un muñeco que representaba a mi persona y que llevaba un lazo amarillo bien visible. No me han querido fusilar y quemar a mí solamente: han querido mofarse de la lucha por la libertad de los presos y exiliados", ha escrito Puigdemont en su cuenta de Twitter.

JxCat exigirá la renuncia del alcalde de la localidad sevillana, el socialista Antonio Pérez, y pedirá que actúe el Síndic de Greuges, el defensor del pueblo catalán y ha sostenido que "el presidente Puigdemont es diputado y el presidente legítimo de Catalunya".