La Fiscal General del Estado, María José Segarra, tiene en sus manos desde este miércoles un escrito de más de cuarenta páginas en el que se detalla el acoso sufrido por Ciudadanos en Rentería (Gipúzcoa) el pasado domingo. Se trata de la denuncia del partido naranja que el propio Albert Rivera y una de las protagonistas del acto, Maite Pagazaurtundúa, número dos a las elecciones europeas, presentaban en la sede de la Fiscalía en Madrid.
El texto entrecomilla insultos e invectivas como "fascistas de mierda"; "hijos de puta"; "os tenemos en la mira" u "os tenían que haber matado", todos ellos dirigidos a la comitiva naranja en general y a Rivera, Pazagaurtundúa (víctima del terrorismo desde que ETA asesinara a su hermano Joseba en 2003) y Fernando Savater en particular.
Pero además de la descripción de lo ocurrido, Rivera aseguraba, en declaraciones a los medios en la puerta del Ministerio Público, que la denuncia incluye algo "novedoso, preocupante y relevante políticamente", que no es otra cosa que un "vínculo" o "concertación" entre lo ocurrido el domingo en la localidad gipuzcoana y los homenajes a etarras que se repiten en el País Vasco en los últimos años, singularmente cuando los terroristas abandonan la cárcel.
"Instigadores políticos"
"Hay pruebas en este documento de organizaciones de la Izquierda Abertzale, los mismos que organizan actos de homenajes a los asesinos son los mismos que con el mismo logo, la misma marca, las mismas palabras, organizan boicots y revientan actos a Ciudadanos" señalaba el candidato naranja a la presidencia del Gobierno, quien una y otra vez pedía a Segarra que "tire del hilo" porque "detrás de estos señores están los de siempre" o, dicho de otra manera: "Hay instigadores políticos detrás de lo que sucedió el otro día, no fue una causalidad".
En la demanda se alude directamente a Ernai, una organización considerada heredera de Jarrai y Segi, organizaciones que fueron ilegalizadas en su día por formar parte del entorno de ETA. En el anexo documental se incluyen mensajes de la cuenta de Twitter de esta organización el pasado sábado 13 de abril, víspera del mitin de Ciudadanos en Rentería, haciendo llamamientos al boicot.
Para Rivera, la denuncia protege "a los ciudadanos españoles" ya que no puede ser, aseveraba, que quienes acudan a un acto político salieran, como ocurrió el domingo, "escoltados y amenazados". Además, señalaba que "el día después de Rentería hay que ir a trabajar, hay que llevar los niños al colegio, hay que ir a la carnicería, a comprar, en definitiva, hacer la vida diaria y mucha de esa gente va a estar estigmatizada y señalada precisamente por lo que la Izquierda Abertzale pretendía el otro día".
Rivera ya solicitó el pasado lunes a la Fiscalía que actuase "de oficio" pero finalmente tomó la decisión de presentar una denuncia, que alude a los delitos de amenazas, injurias y odio.