Dos de los curas con mayor predicamento en el sector independentista del clero catalán, Manel Pousa, conocido como el Pare Manel, y Cinto Busquet, párroco en Calella (Barcelona), han atribuido las denuncias de abusos sexuales en Montserrat y su difusión a causas políticas. Consideran que se trata de un "ataque a Cataluña".
Pousa, que formó parte de la candidatura de Puigdemont en las pasadas elecciones autonómicas, ha declarado en una entrevista al medio catalán Crític y en relación a los abusos en Montserrat que "aquí hay descaradamente un ataque en Cataluña". En su opinión, que salgan casos de hace cuatro décadas responde a motivaciones políticas.
Pousa es una celebridad entre la izquierda nacionalista y preside una fundación benéfica con su nombre. Reconoció en un libro en 2011 haber ayudado a abortar a dos menores de 14 y 15 años. El arzobispado de Barcelona inició unos trámites de excomunión que quedaron en agua de borrajas.
"No parecía muy abusado"
Hace diez días, otro sacerdote independentista, Cinto Busquets, párroco en Calella (Barcelona), afirmaba que le olían "a chamusquina" las denuncias sobre los abusos sexuales en Montserrat y su difusión en los medios. También aseguró que uno de los denunciantes, Miquel Hurtado, "no parecía muy abusado".
Busquets, que recorre Cataluña para dar conferencias ante grupos de la Assemblea Nacional Catalana (ANC) y Òmnium en las que difunde las teorías supremacistas de Torra, no tenía ninguna duda sobre las implicaciones políticas del asunto. "No quiero decir que no hubiera nada, pero que en este momento, a 25 años, que se saque esto contra Montserrat, en el proceso político que vivimos y con todo lo que han dicho los medios sobre Montserrat sabiendo lo que representa en el imaginario político...", declaró Busquets a la televisión local de Calella.