La simbología independentista ha llegado a un lugar en el que no tendría que estar: los centros sanitarios públicos. Ante esta realidad, un grupo de médicos ha decidido romper su silencio y alzar la voz. Se trata del Sindicato Médico Catalán Simecat, una organización que nació hace alrededor de un año y que defiende la neutralidad en la sanidad.
Su secretario general, Alex Ramos, en el programa Es la tarde de Dieter, ha definido la actual situación como una mala praxis política y sanitaria que atenta contra los derechos y libertades de todo el mundo. "Los centros sanitarios se deben a que los pacientes y usuarios acudan a sus dependencias a solventar sus problemas de salud y no a tener que ver una ideología impuesta", ha afirmado.
Ante la exigencia de la Junta Electoral de quitar lazos amarillos y esteladas de edificios públicos, este sindicato de médicos defiende que se debería hacer de "forma continúa" y no solo de cara a las elecciones del 28 de abril. En este sentido, Ramos ha advertido que esta imposición ideológica en los centros sanitarios públicos no favorece al buen clima. "No hay que propiciar las rencillas, uno se encuentra cómodo, otro incómodo. No tiene sentido. En los centros de sanitarios estamos para resolver problemas de salud no para encontrarnos con problemas que nada tienen que ver con la salud".
Desde Simecat sostienen que la imposición de la simbología independentista se ha incrementado tras la detención de los políticos catalanes que están siendo juzgados por el Tribunal Supremo. Ramos se ha referido en concreto a lo que ocurre desde hace un año en el Hospital Clínic: "más o menos, una día a la semana se congregan en el hall de un hospital un sector que pertenece a esta ideología (y que pertenecen al hospital) hacen una especie de performance con simbología de lazos amarillos y con esteladas".
Alex Ramos ha definido la situación como una especie de "espiral del silencio" y lamenta que es inaceptable y no se puede soportar por más tiempo.