PP y Ciudadanos no tardaron en manifestar su rechazo a la devolución del dinero desgravado en su día a Hacienda, que tendrían que hacer ahora los padres que llevan a sus hijos a colegios concertados.
El partido naranja, en una pregunta escrita remitida al Gobierno el pasado mes de octubre sobre esa cuestión, ya denunciaba una "persecución" a los padres de la concertada, un argumento en el que incidía este martes su portavoz parlamentario, Juan Carlos Girauta, para quien el Ejecutivo socialista se mueve en esta cuestión por motivos "ideológicos", es decir, gravando "algo que no le gusta". Girauta cifraba en hasta 3.000 euros lo que la medida puede suponer para muchas familias.
En declaraciones a los servicios informativos de esRadio, el portavoz de Hacienda de Ciudadanos, Francisco de la Torre, acusaba al ministerio de María Jesús Montero de estar "abriendo la puerta a una campaña de control de las declaraciones de renta de todos los padres que llevan sus hijos a colegios concertados". De la Torre aseguraba que la plaza de la concertada le cuesta al erario público "la mitad" que la plaza en la escuela pública y auguraba una disminución de la demanda si finalmente no hay deducciones fiscales que podría conllevar, advertía "un problema de déficit de plazas" en los colegios de la red pública. Algo que podría ocurrir singularmente, según el dirigente naranja, en la Comunidad de Madrid.
En la misma línea, en una comparecencia ante los medios después de la Junta de Portavoces, se manifestaba la portavoz del Grupo Popular, Dolors Monserrat, quien reivindicaba a su formación como "el único partido" que ha "defendido siempre la concertada". Monserrat acusaba a los de Albert Rivera de cambiar su discurso en esta materia según sea en un territorio u otro: "En Murcia están contra la concertada y en Castilla-La Mancha están a favor".
"Nosotros apoyamos a todos los padres que libremente eligen que sus hijos vayan a una concertada. Por tanto, no estamos a favor de la medida que va a tomar el Partido Socialista" sentenciaba la dirigente popular.