Están preocupados porque tanto la imagen como la idea de España están en un "peligroso retroceso" en el País Vasco y Navarra. Y es por esta razón por la que un grupo de notables vasco-navarros, que durante años dieron la cara contra el nacionalismo obligatorio y el terror que imponía el terrorismo de ETA, han decidido dar un paso adelante y abrir "un espacio de debate y reflexión que contribuya a recuperar la idea de España en positivo".
Quieren cambiar la visión "deformada" que el Gobierno vasco, que salvo cuatro años lleva todo el periodo democrático en manos del nacionalismo, ha instaurado en la sociedad vasca. También el ejercicio similar que está intentando llevar a cabo en Navarra el actual gobierno de Uxue Barkos. Quieren rescatar "el proyecto nacional de España del que vascos y navarros formamos parte desde su nacimiento".
Es así como nace la asociación Esteban de Garibay, que este sábado se presenta en Bilbao. Exactamente, en La Sociedad Bilbaína. Presidida por Carlos Urquijo (histórico diputado vasco del PP y exdelegado del Gobierno en la región), contará entre los miembros de su junta directiva con Fernando Savater (filósofo, escritos y uno de los precursores de Basta Ya!), Iñaki Arteta (director de cine) o Ricardo Benedi (empresario vasco que denunció la extorsión de ETA).
Estarán acompañados también en la dirección de la asociación por Conchita Martín (viuda del coronel Pedro Antonio Blanco, asesinado por ETA en enero de 2000), por Juan Félix Huarte (empresario navarro), Beatriz Fanjul (presidenta de Nuevas Generaciones del PP en el País Vasco) y por Iñigo Gómez Pineda (presidente de la Fundación Villacisneros, de la que forma parte también al ex secretaria general del PP vasco María San Gil).
La actividad de la asociación comenzará a andar, después de su presentación, con unas jornadas sobre el final de ETA, sus consecuencias y si se ha producido con o sin impunidad para los asesinos y sus cómplices. Después llegarán otros ciclos de conferencias, que estarán relacionados con el coste económico de la independencia o con la educación. Todo con el objetivo de llegar a la sociedad civil allí donde no pueden llegar los partidos políticos.