El Mundo titula: "La rendición de Pedralbes" con "la imagen de la humillación". Francisco Rosell dice que ayer Sánchez concedió a los golpistas "una imagen humillante para todos los españoles cumplidores de la ley, concediendo una nueva victoria propagandística al separatismo". Pero si denigrante fue la foto, el comunicado posterior de "ambos gobiernos" fue la letra de una "claudicación que perseguirá a sus protagonistas para el resto de su vida política. Todo un Gobierno de España genuflexo" ante los golpistas por un plato de lentejas. "Lo más grave es que evite, sin duda a demanda de sus interlocutores, mencionar la Constitución". Dice Rosell que Sánchez "pagará sus errores en las urnas", si es que las pone alguna vez, que este tío empieza a dar miedo. Federico Jiménez Losantos, aún más cabreado que Rosell, dice que el gobierno "se arrastró a los pies del catanazi Torra para comprar su seguridad". "Hoy veremos el grado de violencia que Torra considera más conveniente para sus intereses, que se resumen en uno: la destrucción de España. Toda la izquierda, decididamente antinacional, les apoya. Frente a ellos, los tres partidos constitucionales y/o nacionales: PP, Ciudadanos y Vox. Y la fuerza legal y legítima del Estado que el Gobierno se niega a emplear. Ayer, cobardía; hoy, terror. Mañana, peor". Por la flojera de ayer de los lacis, parece que Torra les ha dado órdenes de ladrar mucho pero no morder.
El País se va por las ramas. "Sánchez y Torra pactan buscar una 'propuesta política de amplio apoyo'". Por lo visto, para Sánchez el amplio apoyo se limita a extrema izquierda y separatistas, al resto de españoles les ha dado la espalda. Defiende el editorial que la nota es "constitucional" aunque no aparezca la Constitución, que la tierra es plana y que lo blanco y en botella no es leche. Que Sánchez es una víctima, "acosado por una oposición que comparte con el independentismo la estrategia de radicalizar las respectivas posiciones". Pobre. Vidal-Folch casi nos hace llorar. "La factura política de la imagen de Sánchez con Torra la pagará, de entrada, el presidente del Gobierno", y es que "se le pide mucho". Uy, qué pena. No, corazón, le pedimos que libere las urnas que mantiene secuestradas.
ABC: "Sánchez, reo de su pacto". "Sánchez se vende a Torra", dice Rubido. "Ayer cambió una foto vergonzante por una reactivación del 'club de la moción de censura'". Ni palabra sobre "el respeto al Estado de derecho y a la Constitución, ni un tímido reproche al golpe de Estado unilateral". "Resulta penoso que en el PSOE nadie abra la boca pese a la certeza de que conduce al partido a un abismo electoral". ¿PSOE? ¿Qué PSOE? Luis Ventoso sintió anoche una "sensación difusa entre rabia y humillación, al ver a un presidente de España, un tipo que ni siquiera ha ganado las elecciones, arrastrándose ante el líder de la insurrección (…) Un presidente iracundo con Casado y Rivera, pero que escucha con respeto y reverencia a quien porta en su solapa un lazo amarillo de apología de los golpistas antiespañoles". "Sánchez y el PSOE han pisoteado a millones de españoles, incluidos muchísimos catalanes, saturadísimos de soportar ofensas". Para Hermann Tertsch, Sánchez "tiene tanta osadía como falta de escrúpulos y vergüenza". En resumen, que le ponen como un trapo.
La Razón dice que "Sánchez claudica ante Torra". "El presidente del Gobierno ha degradado el cargo que representa y sitúa a las instituciones del estado a la altura de quienes atentaron contra el Estatuto y la Constitución. Ha sido, en definitiva, la cumbre de la indignidad". Ussía va más allá y dice que Sánchez ha culminado "la traición a España a cambio del apoyo de los golpistas". "Entre Sánchez y Torra pueden provocar un conflicto civil de proporciones preocupantes y todo por no perder el avión, el helicóptero, los viajes y los paseos por los jardines de La Moncloa. O el PSOE reacciona y abandona su vergonzosa pasividad, o este tío nos lleva al enfrentamiento". Qué manía con apelar al PSOE, que el PSOE ya no existe.
La Vanguardia dice que "Sánchez y Torra discrepan pero afianzan la vía del diálogo". Pues no se ve la discrepancia por ninguna parte. Parece que Sánchez se lleva de maravilla con el "Le Pen español". Enric Juliana nos hace un resumen de lo que que pasado desde mayo hasta ahora. Lo mas llamativo es el siguiente párrafo. "Tras ser investido presidente, durante cinco minutos pensó en convocar elecciones generales en septiembre u octubre. Prevaleció finalmente el fuerte instinto gubernamental del PSOE". ¿Instinto gubernamental? Hala, vete chaval, ambición infinita de poder, se llama. "Gobernar, gobernar, gobernar, para absorber mejor el voto fugado de Podemos y proyectarse como el único partido capaz de evitar el desgarro de las Españas". Eso no te lo crees ni tú. Si fuera así no estaría todo el día insultando a Cs y al PP y despreciando a la mitad de Cataluña mientras les hace carantoñas a los independentistas que se imponen por la fuerza a los catalanes que no lo son.