El presidente de Tabarnia analiza la actualidad política de España en una entrevista en El Mundo en la que denuncia la metástasis en la sociedad provocada por los independentistas: "A ellos no les une la ilusión por Cataluña, sino el odio a España".
Albert Boadella reconoce que "el humor sirve hasta para enfrentarse a la muerte", pero que "el espectáculo que dan los independentistas es tal que es difícil que por sí solo no se pueda construir una sátira formidable". Y señala que "el problema es que están enajenados". "Tenemos a dos millones y pico de personas, sobre todo, localizados en la Cataluña agropecuaria, unidas en el odio a España".
El dramaturgo señala el inicio de esta deriva independentista por la que pasa Cataluña en un "hecho crucial": "La autodestrucción de la oposición, cuando el PSC se pasa al nacionalismo, a partir de Maragall". Es entonces cuando deja de haber oposición y "se consolida una especie de régimen en el que lo importante no es la política, sino la consecución de una Cataluña independiente".
Además, apunta a la "traición" del PSOE de Zapatero. "La reforma del Estatuto de Zapatero fue un punto de inflexión. Hay que recordar que si los distintos Gobiernos hubieran mantenido su estructura legal intocable, no hubiera sucedido nada".
Tampoco deja fuera de toda culpa a Aznar, que cedió hasta el 30% del IRPF y el despliegue total de los Mossos. "Y una cosa más grave: la Ley de Política Lingüística, con la que la Generalitat ha hecho muchos disparates", apunta Boadella.
Del actual presidente, Pedro Sánchez, dice que "tiene todas las características de la psicopatía: no distingue entre el bien y el mal, y puede decir hoy una cosa y mañana la contraria. Por tanto, a él no le parece indigno ni inmoral el que esté dando fuerza, ánimo y sangre a una gente que quiere destruir la estructura del Estado".
A Rajoy le achaca no haber empleado con determinación el artículo 155. Rajoy "es un fracaso absoluto en la cuestión catalana. Se equivoca totalmente porque es un hombre cobarde. Tiene una parte de responsabilidad clara en la deriva catalana porque todavía estaba a tiempo de frenarla. Un 155 bien aplicado hubiera dado buenos resultados".
Es por eso que Albert Boadella pide mayor intervención del Estado en Cataluña en Educación y en los medios de comunicación. "Lo que no puede continuar es una educación que desde parvulario vaya haciendo nuevos adeptos a la secta". "Hay que conseguir que los medios de comunicación públicos no actúen contra el propio Estado. Hay que lograr que, durante uno, dos o tres años, el ciudadano nacionalista vea que con este Estado intolerante y fascista, o como quieran llamarlo, continúa su vida natural, sus hijos pueden seguir aprendiendo el catalán en las escuelas y continúa pudiendo ver TV3, pero con una variante en sus contenidos" "O es esto o nos comemos la independencia", sentencia el presidente de Tabarnia.
Boadella señala que el catalanismo es la raíz de la xenofobia del independentismo porque "el catalanismo nace con la idea de que España es más cutre, pobre e intolerante, y que si Cataluña no es más es porque España no le deja".