Cada vez más envalentonados ante la falta de reacción los Mossos d'Esquadra, miembros de la organización separatista Arran, vinculada a la CUP, han atacado con "balas" de pintura una comisaría de la Policía Nacional en Tarrasa. La acción se ha llevado a cabo de madrugada y ha consistido en lanzar bolsas de pintura contra la fachada. Como es habitual, han subido a las redes sociales un vídeo del ataque y varias fotos del estado en el que ha quedado la fachada de la comisaría.
Arran protestaba así por la detención de tres componentes de los Comités de Defensa de la República (CDR) por su participación en los incidentes durante la manifestación de Jusapol del pasado 29 de septiembre y en la que varias personas fueron agredidas por violentos separatistas. Tras pasar a disposición judicial, los tres individuos quedaron en libertad con cargos.
También venden los jóvenes de Arran este nuevo ataque como una respuesta a Ciudadanos por la denuncia por delito de odio a raíz del señalamiento del domicilio del juez instructor del golpe de Estado, Pablo Llarena. "Si nos tocáis a las compañeras, atacamos las comisarías" y "no pasarán" entre dos dibujos de bombas son algunas de las consignas que han difundido junto con el vídeo.
A raíz del señalamiento con pintura amarilla del portal del edificio donde reside la familia Llarena, el presidente de la Generalidad se vio obligado a lamentar los hechos por el impacto propagandístico negativo en el relato del pacifismo separatista.