Colabora

El Gobierno tiene un as en la manga para evitar el entierro de Franco en la Almudena

El problema ya no es sacarlo sino "dónde meterlo". La portavoz Celaá no concreta si será un Real Decreto pero sostiene que "hay mecanismos".

Cripta de La Almudena | David Alonso Rincón

El Gobierno se sigue viendo forzado a improvisar y a rectificar sus planes originales de exhumar a Franco. Si el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, confirmaba este miércoles la noticia adelantada por Libertad Digital que modifica por tercera vez los plazos para exhumar a Franco –ahora en 2019–, también va modificando los mecanismos para hacerlo a medida que se complican los que ya se pusieron en marcha.

El primero de ellos, el decreto de exhumación del dictador, se aprobó en el Consejo de Ministros del pasado mes de agosto cuando anunció Carmen Calvo que la exhumación se produciría "a finales de año". Un decreto al que se ha seguido dando trámite este jueves el Consejo al anunciar que se ha dado orden para que la ministra de Justicia, Dolores Delgado, traslade el proyecto de exhumación al Ayuntamiento de San Lorenzo de El Escorial. Un paso que contará con el nuevo plazo de un mes más otros diez días de alegaciones de las partes.

El segundo, la reforma de la Ley de Memoria Histórica, a través de la cual el Gobierno quiere impedir que se inhume a Franco en la Almudena, se encuentra en fase de enmiendas en el Congreso. Aunque el Gobierno empieza a ser consciente de la voluntad de PP y Ciudadanos de postergar la aprobación de la Ley que se tramita por la vía de urgencia. De hecho, las dos formaciones de centroderecha solicitaron este martes una prórroga en el plazo de presentación de enmiendas que expira el lunes de la próxima semana.

Es por ello que el Ejecutivo baraja ahora un nuevo mecanismo. Un "recurso" que pareció confirmar la portavoz del Gobierno, Isabel Celaá, al ser preguntada este viernes en Moncloa. "El Gobierno no va a permitir que un dictador siga ocupando un lugar público que se preste al enaltecimiento. Eso, con la ley en la mano y con todas las declaraciones del Parlamento Europeo, con toda la legislación española. Y por tanto habilitará los recursos y el procedimiento que estime oportunos para evitarlo. Ustedes lo conocerán en tiempo y forma".

Y no es el tiempo de conocer la forma. Fuentes del Ejecutivo se limitan a pedir paciencia y a sostener que "cada cosa a su tiempo" pero sin descartar que la fórmula sea un tercer mecanismo a través de un nuevo Real Decreto que garantiza la vía de urgencia y evitar demorar de por sí unos plazos con los que "ya vamos tarde".

Celaá sí explicó que ahora el Gobierno no tiene prisa en tramitar el decreto de la exhumación hasta no tener garantizada la inhumación. Es decir, que lo importante ahora no es tanto sacar a Franco como impedir que sea enterrado en la Almudena. "Se está trabajando en la Ley de Memoria Histórica. Una cuestión llevará ajustarse a la otra. El 2019 arrancará sin contar España con un dictador que pueda ser enaltecido". En resumen: el Gobierno se ha metido solo en su propia trampa. Si antes del verano el problema era sacar a Franco del Valle ahora el problema es "dónde meterlo".

Temas

Ver los comentarios Ocultar los comentarios

Portada

Suscríbete a nuestro boletín diario