Nunca un partido extraparlamentario se ha convertido hasta ahora en el epicentro del debate político en el parlamento y menos aún por la intervención del presidente del Gobierno. En el turno de réplica en su comparecencia en el Congreso, Pedro Sánchez quiso reprochar la actitud "radical y extremista" de "las derechas" y acusó al líder del PP, Pablo Casado, de "hacer manitas ideológicas con VOX".
Algo ante lo que formuló la siguiente pregunta: "señor Casado, ¿me puede decir qué valores esenciales comparte usted con VOX?". Y añadió una segunda pregunta al líder de Ciudadanos: "¿señor Rivera, nos puede decir por qué no rechaza la asistencia de VOX al acto que usted va a celebrar en Navarra?".
Sánchez se burló de "los mellizos" Rivera y Casado y volvió a mentar a la nueva formación política en el espectro de la derecha: "ahora resulta que tenemos un trillizo", indicó provocando las risas de la bancada socialista. "Y ése trillizo ¿no habrá salido por alimentar el discurso de extrema derecha que usted y el señor Casado están alimentando de manera irresponsable?".
Previamente, el jefe del Ejecutivo calificó de "lamentable" haber sido calificado de "golpista" por Casado y le instó a rectificar desde la tribuna de oradores para que no conste en el diario de sesiones.
Mantiene la venta de armas
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha confirmado este jueves que se mantendrán los contratos suscritos con Arabia Saudí, como adelantó Libertad Digital, pese al asesinato del periodista Jamal Khashoggi. "Soy plenamente consciente de las especiales circunstancias que concurren en torno a este debate a raíz de la revelación de sucesos recientes. Tengo que decirles que yo también comparto esa consternación. Con toda esa repulsa y este hecho que condeno sin paliativos, hay que actuar con responsabilidad".
El presidente español añadió que "defiendo los intereses de España y no miro hacia atrás sino hacia adelante" porque como presidente "entiendo que debo conciliar intereses". Y se refirió expresamente a los intereses de Andalucía, no sólo del PSOE sino de "algunos alcaldes de la bahía de Cádiz" como Jose María González alias Kichi que defiende el mantenimiento de la construcción de cinco corbetas en los astilleros de Puerto Real en Cádiz.
Según el presidente, "hay contratos que cumplen con los requerimientos de la normativa aplicable en nuestro país y que no entran en contradicción con la resolución 2.216 del Consejo de Naciones Unidas. Hay que conciliar intereses", abogó Sánchez.
Una de sus comparecencias más complicadas por la posición contraria de toda la oposición, salvo el PP, a la venta de armas a Arabia Saudí. Motivo por el que quiso realizar un anuncio sin concreciones y en apenas diez segundos. "Plantear una propuesta que nos sitúe a la cabeza y que va a ser pionera en controles de verificación y de transparencia". Propuesta que no concretó ni el presidente ni, posteriormente, el gabinete del Palacio de la Moncloa.