"Yo estoy dispuesta a ser candidata en una plataforma que se tiene que crear, que yo no la voy a crear. Ahora Madrid fue un gran invento, (pero) el tiempo pasa y un gran síntoma de que la ciudad está viva es que nosotros sigamos innovando". Así se expresó Manuela Carmena el día que anunció oficial y públicamente que volvía a presentarse. Su paso adelante, no obstante, incluía condiciones: la más importante, tener el control de la lista con la que concurrirá a las elecciones municipales del próximo mes de mayo.
La alcaldesa no quiere chascos ni sorpresas desagradables. Quiere contar con sus más leales colaboradores, con las personas que durante esta legislatura han apagado los fuegos que otros avivaban. Ya lo dijo en aquella intervención del pasado mes de septiembre: la plataforma que quiere liderar estaría compuesta por personas con perfiles que le "sean útiles para gobernar".
Pero Ahora Madrid es Podemos fundamentalmente. Fue el partido de los círculos –con la ayuda del PSOE de Pedro Sánchez– el que encumbró a Carmena a la alcaldía de la capital. Y muchos de sus principales concejales lo son por la formación morada. Es el caso de Rita Maestre (portavoz municipal), Jorge García Castaño (responsable de Economía y Hacienda) o José Manuel Calvo (titular de Urbanismo). Y la alcaldesa de Madrid quiere que estos nombres –junto a otros, especialmente el de su número dos Marta Higueras– conformen los puestos de salida de la lista electoral.
Pero desde la cúpula de Podemos pretenden que el ex-Jemad Julio Rodríguez esté situado en uno de los puestos de la cabeza de la lista, algo que no ven con buenos ojos desde el Consistorio. De hecho, esta imposición ha sido una de las razones por las que durante este martes Rita Maestre y tres concejales más de Podemos –Jorge García Castaño, Jose Manuel Calvo y Esther Gómez–, se han planteado no acudir a las primarias de la formación morada y que fuera Manuela Carmena la que les integrara a dedo en su equipo para la capital sin pasar por el proceso interno.
La decisión parecía firme, hasta el punto de que Maestre se la había comunicado a la dirección morada, pero finalmente, tras las presiones internas, ella y los demás se han echado atrás. Ésta no es la única desavenencia en el polvorín de las primarias del partido. Esta medianoche se cerraba el plazo para que los candidatos se inscribieran y los anticapitalistas del partido, con Rommy Arce a la cabeza, han decidido no presentarse a este proceso interno.