El expresidente del Gobierno Mariano Rajoy ha asegurado que su salida de la presidencia se debió no a un "cese del pueblo español", sino a que lo "cesaron unos partidos de extrema izquierda y unos partidos independentistas" con los que el PSOE "hizo un triste papel". "Y así nos va", ha añadido.
En la primera entrevista de Rajoy tras dejar el cargo a principios de junio por la moción de censura encabezada por el líder socialista Pedro Sánchez, el exlíder del PP ha conversado con unos alumnos de la Universidad Internacional SEK de Quito durante su visita al país ecuatoriano.
"Tengo que decir que sí batallamos (la moción de censura). Hubo un debate en donde quedó claro que no había razón para una moción de censura y que esta saliera adelante. Es la primera vez en la historia de España desde 1977, más de cuarenta años, que quien ganó las elecciones no gobierna", ha lamentado.
Rajoy ha recordado que el PP ganó las elecciones y "lo más sorprendente" fue que se hiciera una moción de censura tres días después de que el Gobierno hubiera sacado adelante los presupuestos, "que es la norma más importante que se presenta en el Parlamento a lo largo del año".
"Habría que preguntar al PNV por qué un partido que aprueba los presupuestos a los tres días cambia de criterio... Probablemente haya habido falta de personalidad o miedo a lo que hubieran podido decir algunos sectores de algunos rincones del País Vasco", ha añadido.
En la entrevista, Rajoy repasa toda su labor al frente del Gobierno y, respecto a su salida, afirma sentirse "un hombre muy feliz" con su vida actual. "No voy a decir que fuera infeliz a lo largo de mis más de treinta años de político porque entonces estaría reconociendo que fui un señor muy infeliz a lo largo de mi vida, cosa que no es cierta. Pero había que tomar decisiones y la gente muchas veces no las entiende. Entonces, ahora, estoy mejor", ha explicado.
Asimismo, ha defendido su labor, resaltando que cuando entró a la presidencia en el año 2011 España era "un país al borde de la quiebra, con un déficit monumental" y al salir del Gobierno "era un país respetado. ¿Cómo se puede resumir esto? Pues que cuando yo me fui había dos millones de personas más trabajando que cuando llegué", ha apuntado.
Preguntado respecto a otros líderes políticos, ha reconocido que Sánchez es "un hombre perseverante dando la batalla en su partido y para conseguir objetivos", aunque "otra cosa son los juicios de valor, que no proceden al estar hablando de lo bueno". Sobre el dirigente popular, Pablo Casado, ha señalado que es un político "joven pero experto" con "mucha ilusión, ganas y empuje".
Rajoy se refiere al líder de Podemos, Pablo Iglesias, como "un hombre de buen trato personal, que en los tiempos actuales es de agradecer", si bien ha destacado que sus "coincidencias con él son las que todo el mundo conoce". Y para el presidente de Cs, Albert Rivera, ha indicado que "hay que reconocer el mérito de fabricar un partido donde no había nada".
El expresidente ha asegurado que su relación con los reyes fue "estupenda" durante su mandato y como "luces" de su Gobierno ha destacado la recuperación económica o el fin de ETA "sin que nadie pagara un precio político". "Lo de las sombras es difícil, porque castigarse a uno mismo cuando hay tantos voluntarios para hacerlo...", ha ironizado.
Rajoy ha concluido adelantado que ve a España dentro de diez años "mucho mejor que hoy" y, en cuanto a Latinoamérica, ha ofrecido una "receta" para Venezuela. "Quiero para ella lo mismo que para España: democracia, libertad, partidos democráticos e instituciones representativas", ha señalado.