Un diputado de la CUP se hace desalojar del TSJC por los Mossos para provocar a Torra

Los Mossos d'Esquadra han retirado una a una a las más de cien personas que se habían congregado este jueves a las siete de la mañana en las escalinatas del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña, en el paseo Lluís Companys de Barcelona. Entre los concentrados, convocados por los Comités de Defensa de la República (CDR), se encontraba el portavoz de la Candidatura de Unidad Popular (CUP) en el parlamento catalán, Carles Riera, que ha sido apartado del lugar por los Mossos sin oponer resistencia.

Los CDR habían montado la acción a las puertas del TSJC porque se cumplen siete meses de una acción similar de protesta contra la "injusticia" española. En aquella ocasión fueron identificadas catorce personas y la Fiscalía pide penas de prisión para once de ellas, según un comunicado de los propios CDR.

ATENCIÓ! TOTHOM AL TSJC!

Fa més de 7 mesos que els #CDRenXarxa vam fer una acció NO violenta al #TSJC per denunciar la repressió rebuda.

La fiscalia demana presó per a 11 de les 14 companyes que van ser detingudes, per això avui tornem a fer-ho!

#27S #TornemAlTSJC pic.twitter.com/1pTu0FtOdt

— CDR Catalunya (@CDRCatOficial) 27 de septiembre de 2018

"Cuando la injusticia es ley, la desobediencia es deber", rezaba la pancarta de los concentrados. Riera ha aprovechado la circunstancia para reprochar a Torra y su ejecutivo que llamen a la movilización permanente al tiempo que ordenan a los Mossos desalojar la acampada en la plaza de San Jaime o la concentración ante el TSJC. La CUP ha publicado un mensaje en Twitter con un vídeo que recoge el momento en que dos Mossos proceden sobre un descamisado Riera.

🎥 Això és la vostra crida a la mobilització permanent @QuimTorraiPla i @MiquelBuch els @mossos desallotjant a manifestants entre ells @carlesral#TornemalTSJC pic.twitter.com/VBLs0PHdXj

— CUP Països Catalans (@cupnacional) 27 de septiembre de 2018

La CUP trata de provocar una oleada de manifestaciones como las acontecidas el año pasado y acusa a Junts per Catalunya y ERC de dar la espalda al "mandato" del 1-O. Los desalojos de los Mossos comprometen la estabilidad del gobierno catalán y la mayoría separatista en la cámara, dado el necesario apoyo de la CUP.