La Audiencia Nacional ha rechazado por segunda vez la extradición de Hervé Falciani a Suiza. La Sala de lo Penal ha resuelto en línea con el criterio de la Fiscalía con el mismo argumento que utilizó en 2013: que nuestro Código Penal no incluye ningún delito similar al de "espionaje financiero agravado" por el que la Justicia helvética condenó al informático a cinco años de prisión. Un razonamiento sumado ahora al hecho de que los hechos ya fueron valorados y son "cosa juzgada".
Los dos episodios de esta solicitud de extradición infructuosa tienen algún múltiplo en común. Principalmente, que la defensa de Falciani estuvo y está conducida por el despacho de abogados del magistrado inhabilitado Baltasar Garzón, recientemente implicado en el caso Villarejo por el supuesto boicot a la entrega de un empresario a Guatemala, donde se lo investigaba por corrupción. Existe una segunda coincidencia: la fiscal de la Audiencia Nacional que intervino y se opuso a la primera extradición de Falcini por parte de Suiza fue Dolores Delgado, hoy ministra de Justicia, íntima amiga del exjuez y salpicada también por la vertiente de la Operación Tándem, según fuentes consultadas por Libertad Digital.
Robo masivo de datos
La justicia helvética condenó a Hervé Falciani en mayo de 2017 a cinco años de cárcel por un robo de datos bancarios. El extrabajador del HSBC obtuvo información confidencial de 130.000 clientes del banco privado con sede en Ginebra. Su posterior colaboración con varios países, entre ellos España, para la detección de miles de evasores fiscales, le sirve para evitar la extradición.
La Audiencia Nacional denegó en 2013 la entrega del informático por los mismos hechos. Este pronunciamiento se produjo cuando la causa estaba todavía en fase de instrucción, de forma que el escenario ha variado sensiblemente con una condena firme sobre la mesa. La Sección Segunda de lo Penal rechazó la entrega de Falciani porque no concurría el principio de doble incriminación: que los delitos de los que se acusa al requerido en Suiza no están tipificados en la legislación española.
Garzón, al lado de Falciani
Baltasar Garzón ha defendido siempre los intereses de Falciani y quienes están en situaciones parecidas. En una conferencia en abril de 2018, el exjuez descartó que se pudiera utilizar a su cliente como moneda de cambio para la extradición de los separatistas procesados en España y fugados a Suiza: "Jamás Suiza, ni otros países, van a aceptar monedas de cambio. Las cosas no funcionan así. Los jueces son independientes y van a hacer su interpretación. Y si aquí tiene que decir no a la extradición van a decirlo. Y si Suiza tiene que decir no a la extradición de personas, si se reclama, vinculadas al 'procés', van a decir no".
Mostró su preocupación por la desprotección que a su juicio sufren los alertadores de la corrupción o 'whistlerblowers', como ha denominado a Falciani: "Se olvidan de que prestaron un gran servicio a costa de su seguridad, de sus vidas, de la seguridad de sus familias". Recordó la colaboración de su cliente con varios países del mundo: "Si hay un ejemplo de colaborador, de un alertador contra la corrupción es Hervé Falciani. Es el precursor y el ejecutor de esa cooperación contra la corrupción".