Tras las merecidas vacaciones de verano, con la llegada de septiembre empieza el nuevo curso. Este año, muchos jóvenes españoles darán el salto desde el Instituto hasta la ansiada Universidad. Este hecho, no sólo supondrá un gran cambio en sus vidas, con más obligaciones, nuevos horarios y mayor nivel académico, sino que también afectará a sus bolsillos.
De hecho, dependiendo de en qué Comunidad Autónoma resida el alumno las matrículas tienen diferentes precios. Tanto es así, que cursar los mismos estudios puede llegar a costar más del triple en una región o en otra, según el último estudio del Observatorio sobre el Sistema Universitario.
Por rama de estudios también hay diferencias de precios. Y es que las carreras de humanidades suelen tener los precios más bajos y los de ciencias de la salud los más altos. La mayor diferencia de precio entre unos y otros se da en Cataluña (857 € de diferencia por curso), seguida por Castilla y León (791 € por curso) y Aragón (724 € por curso). En cambio, en Andalucía todos los estudios tienen el mismo precio.
Por Comunidad Autónoma y en cuanto a grados, en primera matrícula Cataluña tiene los precios mínimo y máximo de grado más altos. Le siguen Madrid y Castilla y León que, junto con Cataluña, son las únicas con precios mínimos por encima de los 1.000 € por curso. Galicia es la comunidad más barata, seguida por Extremadura y Cantabria con precios mínimos también por debajo de los 700 €. Andalucía, con un precio único de 757 € por curso, está por debajo del precio máximo del resto de Comunidades Autónomas, que se sitúan siempre por encima de los 800 €.
Además, hay que tener en cuenta que otro de los factores que encarece considerablemente el precio de matrícula es la repetición de asignaturas, que puede multiplicar hasta 5 y 6 veces el precio inicial.
Los préstamos para estudiantes se han convertido en una opción cada vez más habitual para financiarse los estudios. Además de la banca tradicional, es posible solicitar estos créditos a través de internet sin pasar por la sucursal ni por los largos trámites burocráticos que exigen las entidades. Estos préstamos online cubren normalmente importes de hasta 5.000€ mientras que los préstamos bancarios pueden alcanzar mayores cantidades, eso sí, los requisitos para conseguirlos suelen ser mucho más estrictos.