
La vicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo, ha explicado que no es momento de convocar elecciones anticipadas como demandan algunas formaciones, sino que primero se debe restablecer un Estado del bienestar deteriorado tras años de gobiernos de derechas.
Concretamente Calvo dice que no hay elecciones porque "no les convienen a los ciudadanos y a las ciudadanas". "O la democracia es Estado de bienestar o estamos hablando de contar votos malamente", ha sostenido Calvo.
Así lo ha transmitido en el transcurso del acto celebrado en el Hotel Monumento San Francisco, en Santiago de Compostela, ante más de un centenar de cargos y militantes socialistas, en el primer lugar escogido por el PSdeG para el inicio este sábado del nuevo ciclo político y previo a la celebración de una comida en la localidad de Oroso, acompañada del líder de los socialistas gallegos, Gonzalo Caballero, y del presidente de la FEMP, Abel Caballero.
"Arrimar el hombro" con Cataluña
La miembro del Ejecutivo central ha instado a las fuerzas políticas del país a "arrimar el hombro" ante la "crisis" de Cataluña, en una España constitucional, en la que la comunidad catalana "tiene su sitio" y en la que apela a que "la política vuelva a la política", con pactos en los que todos "cedan y escuchen".
A un día de que se cumplan tres meses de la llegada de Pedro Sánchez al gobierno de la Moncloa, Carmen Calvo, ha afirmado de forma tajante que al PSOE"ningún otro partido le puede decir nada" ante la crisis de Cataluña, y ha apelado a que "frente a esta situación hagan el favor de arrimar el hombro, con cordura" pero también con "patriotismo". "Porque somos patriotas de izquierdas, por España, por Galicia", ha agregado.
Tras recordar que el PSOE respaldó al gobierno de Rajoy, "sin mirar si convenía o no" a los socialistas, cuando se le solicitó su apoyo en la aplicación del artículo 155, ha defendido que el Gobierno tiene un proyecto "de salida" ante los "desajustes" que ha admitido que se han producido cuarenta años después de la creación del Estado de las Autonomías.
Calvo se ha referido así a un proyecto sustentado sobre el respeto a la "diversidad territorial", que tendrá que "coordinar y revisar" el modelo en el que "cabe todo el mundo, incluida Cataluña", con "la Constitución en la mano" y con el Estatuto de Cataluña, y basado en un "diálogo" que debe entenderse como una asignatura "optativa, no troncal y obligatoria".
"Se trata de respetar a otros gobiernos autonómicos, se trata de respetar las urnas siempre, se trata de respetar todas las instituciones, de ida y de vuelta, cuando te digo que las respetes tú las respeto yo", ha proclamado la vicepresidenta del Gobierno, que ha cuestionado: "¿Lo entendéis? Lo deberíamos entender todos, ¿no?".
"Lo hemos demostrado hace meses en la oposición y pocos meses después como Gobierno y en el mismo sitio, otros han cambiado, pero nosotros no", ha proseguido la vicepresidenta, en una intervención en la que ha reiterado que "en una España constitucional, Cataluña tiene su sitio", pero en la que los socialistas quieren que "la política vuelva a la política".