Los padres de los ocho jóvenes condenados en la Audiencia Nacional en 2016 por las agresiones a dos guardias civiles y sus parejas en un bar de Alsasua fueron los encargados de lanzar el chupinazo del colectivo 'Donostiako Piratak' en la Semana Grande de San Sebastián.
La escenificación del desembarco de los "Piratas", previa al lanzamiento del chupinazo, ha estado acompañada de gritos de "Altsasukoak askatu" (Libertad para los de Alsasua). A los actos han asistido representantes de Sortu del Ayuntamiento donostiarra.
El Colectivo de Víctimas del Terrorismo, Covite, ha exigido al alcalde de San Sebastián, Eneko Goia, que condene el lanzamiento "del txupinazo pirata" por parte de los padres de los agresores. Para la Asociación de víctimas de ETA, éstos transmitieron "un discurso de odio e impunidad a la violencia".
Covite ya había pedido a Goia por carta que impidiera que los padres de los condenados de Alsasua realizasen este chupinazo, pero el alcalde contesto que el chupín de "Piratak" no es competencia municipal, ya que no era una actividad programada por el Ayuntamiento.
La asociación de víctimas, a través de las redes sociales, ha reclamado este domingo a Goia que condene el hecho de que estos protagonizaran el 'chupinazo pirata' y ha denunciado que en la fiesta de la Aste Nagusia se vean fotos de presos de ETA.