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Sanz Roldán explica durante casi tres horas la visión del CNI sobre las grabaciones de Corinna

El PSOE se muestra satisfecho con las explicaciones. Podemos dice que sale con más dudas de las que tenían al entrar.

Sanz Roldán en el Congreso. | EFE

Únicamente diez personas. Con la sala cerrada a cal y canto y sin cámaras ni testigos. Tampoco móviles, que quedan convenientemente depositados en un armarito junto a la puerta. Así ha discurrido este miércoles en el Congreso de los Diputados la Comisión de Gastos Reservados, la única de carácter opaco dentro de la institución y en la que ha comparecido el secretario de Estado y director del Centro Nacional de Inteligencia (CNI), el general Félix Sanz Roldán.

Durante casi tres horas, el máximo responsable de los servicios secretos españoles ha estado explicando a sus señorías qué conoce el CNI sobre las grabaciones hechas públicas hace unas semanas en las que Corinna zu Sayn-Wittgenstein, la antigua amiga íntima de Juan Carlos I, acusaba al Rey emérito de un buen número de delitos, como utilizarla de testaferro por ser residente en Mónaco. Unas acusaciones cuya veracidad se desconoce.

Ninguno de los presentes ha explicado qué ha pasado en el interior de la sala. Como bien explicaba Sanz Roldán al inicio de la misma, "es una comisión de secretos oficiales, eso lo explica todo". Pero algunos dirigentes sí han dado su parecer sobre la sesión. La socialista Adriana Lastra se ha mostrado satisfecha con las explicaciones. "No tengo ninguna duda sobre lo que ha dicho el director del CNI", ha dicho.

Menos satisfechos estaban desde las filas de Podemos. "Hemos salido con más dudas de las que teníamos al entrar", ha dicho su representante en la Comisión, que ha asistido a su primera comparecencia de este tipo, en la que el director del CNI ha dado muchas explicaciones o ha respondido a muchas preguntas, según fuentes conocedoras de la comparecencia a las que ha tenido acceso Libertad Digital.

En la comisión han estado presentes la presidenta de la Cámara Baja, Ana Pastor, así como un representante por cada uno de los siete grupos parlamentarios –Podemos ha tenido que dar entrada a Ione Belarra para sustituir a Irene Montero, que se encuentra de baja por maternidad–. La última persona presente, además del propio compareciente, ha sido uno de los letrados de la institución, como es habitual en todas las comisiones.

Son el selecto grupo de diputados que tienen acceso a la información reservada y clasificada de nuestro país. La elección de cada uno de ellos, según el reglamento del Congreso, se realiza a propuestas de los grupos parlamentarios y debe requerir el apoyo de, al menos, tres quintos de los electos de la Cámara (210 parlamentarios). La votación para aprobar su pertenencia o no a la Comisión es secreta e introduciendo el voto en urna.

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