Primera entrevista que concede Jordi Sánchez desde la cárcel. Y lo hace al poco de llegar a la prisión catalana de Lledoners (Barcelona). El País entrevista al diputado de Junst per Catalunya y expresidente de la Asamblea Nacional Catalana durante 45 minutos a través del cristal.
El mensaje es claro y va directo contra la principal línea de actuación del PSC y el Gobierno para encarar la grave crisis nacional: volver al Estatut, declarado inconstitucional. "Lo del Estatuto no tiene sentido, forma parte del pasado y no es una solución. Parte de la ciudadanía catalana cree que se ha ganado legítimamente el derecho a decidir. La España autonómica tiene un techo de cristal. No da más de sí. ¿Qué puede tener de diferente un Estatuto respecto al de 2006? Su propuesta de reforma constitucional es poco razonable. Y además: ¿Y si sale el no? Yo votaría no, por ejemplo. El conflicto seguiría bloqueado".
¿Pensó alguna vez que su activismo independentista podía conducirle a la cárcel?, pregunta el diario de Prisa. "Honestamente, no. No lo imaginé: como líder de la ANC nunca recibí ningún aviso de la Fiscalía ni del juez de que hiciéramos algo ilegal", contesta Sánchez, para quien lo que "ha habido (es) una operación de Estado contra el independentismo".
Jordi Sánchez no ve que exista un "conflicto entre catalanes", que la sociedad de esta comunidad autónoma esté dividida y enfrentada. "Hay tensiones puntuales y me preocupa y deben eliminarse. Hay que encontrar una salida democrática que permite expresarse a la sociedad catalana". El preso reconoce que han abusado "del lenguaje" al equipar Cataluña con el independentismo, como si todos los catalanes lo fueran. "Tendemos a utilizar el plural mayestático", admite.