La batalla entre la cúpula estatal de Podemos y la dirección del partido en Andalucía, capitaneada por Teresa Rodríguez, se ha acrecentado esta semana en la que la formación morada celebra primarias en la región. Un proceso en el que Rodríguez se enfrenta a la candidata de Pablo Iglesias, Isabel Franco. Este viernes, las dos aspirantes celebraron un debate en el que reinó la tensión con acusaciones de "presiones" incluidas.
Desde la cúpula morada llevan semanas cargando contra Teresa Rodríguez por "querer crear un nuevo sujeto político", al margen de Podemos, junto al líder Izquierda Unida en Andalucía Antonio Maíllo. Durante el debate, la líder andaluza del partido se defendió de estas acusaciones destacando que ella lo que quiere es una mayor autonomía de la dirección de Iglesias.
"Por evitar las baronías, Podemos está oficiando una monarquía y no es nuestro modelo tampoco", dijo Rodríguez en un momento de su intervención. "No es buena idea que las 42 listas electorales de España se hagan en Madrid".
Presiones
Pero la acusación de estar "oficiando una monarquía" no fue la más dura del debate. La candidata pablista, Isabel Franco , aseguró que había "habido presiones en determinadas localidades de las provincias de Málaga y Granada" en las que "la gente de Teresa Rodríguez" habían "usado los recursos de todos para ir por los municipios pidiendo que retirasen candidaturas".
Tras estos dardos, lo que no quedó claro en la discusión fue cuál será el nombre de la coalición con IU que Rodríguez lleva meses negociando con Antonio Maíllo.Este nombre es uno de los miedos de la cúpula de Podemos porque temen que no incluya la referencia al partido.
"Va a ser una coalición que contendrá el nombre de Podemos pero también el nombre de Andalucía", precisó Rodríguez. "Podemos ha sido vista como una fuerza política muy madrileña y necesitamos hacer ese Podemos andaluz que nos propusimos en la última asamblea".
Los ánimos, caldeados
Cabe destacar que los ánimos llegaron de por sí crispados a este debate ya que, unas horas antes, Teresa Rodríguez había criticado en una conversación pública en las redes sociales a quienes "señalan con el dedo a las personas por sus ideas. Es como cuando los nazis consiguieron que ‘judío’ fuera en sí mismo un insulto", decía en su comentario.
Estas palabras sentaron como un jarro de agua fría en la dirección estatal del partido en la que se dieron por aludidos. Tampoco cayó muy bien entre los afines a Iglesias la amenaza de Rodríguez de que si pierde las primarias, se va. Algo que ni en Andalucía ni en Madrid ven posible.
Con este panorama, la votación de las primarias acaba este lunes y se espera que ese mismo día se conozcan los resultados.