De todas las decisiones tomadas por Pedro Sánchez en apenas un mes en La Moncloa, la de nombrar a José Félix Tezanos, sociólogo de cabecera del PSOE, como director del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), es una de las que más ha soliviantado a Ciudadanos. Tanto es así que el grupo parlamentario naranja registraba este miércoles una proposición de Ley para cambiar el procedimiento de elección del responsable máximo de los estudios de opinión públicos.
Lo hacía el diputado Toni Roldán, quien admitía la premura de la iniciativa: "Nos hemos visto obligados a hacerlo de manera muy rápida, porque nos hemos dado cuenta de que el PSOE no tenía suficiente con asaltar la Radio Televisión púbica, sino que también quería hacer lo mismo con las encuestas públicas" algo que a juicio de Roldán habría hecho con un "señor que lleva cuarenta años a sueldo del Partido Socialista".
La reforma que plantea Ciudadanos, que aún debe recabar apoyos para iniciar su tramitación, trataría de aplicar al CIS el mismo sistema de concurso público aprobado esta legislatura para RTVE. Pero, sobre todo, excluiría de la presidencia del organismo a todo aquel que, en la década anterior a su nombramiento, hubiera tenido algún tipo de relación con partidos políticos o administraciones públicas, algo bastante habitual en el gremio de los sociólogos.
Un director sin relación con la política
En concreto, el texto de la propuesta fija así las incompatibilidades: "No podrá ser elegido Presidente del Centro quien, dentro de los diez años anteriores a la fecha de la elección, hubiese desempeñado un mandato representativo, un alto cargo o cargos asimilados a este, un cargo de elección o designación política en las Administraciones Públicas o en los organismos y entidades dependientes de las mismas, o un puesto de trabajo, un cargo orgánico u otros con funciones directivas en partidos políticos, federaciones o coaliciones de los mismos".
Es decir, alguien sin mácula de contacto con la política en su experiencia previa, como sin duda no es el caso de Tezanos, quien esta misma semana anunciaba que abandonará la Ejecutiva del PSOE.
El mandato sería de seis años, por lo que un mismo director del CIS podría convivir con gobiernos distintos, y la misma mayoría reforzada de dos tercios del Congreso que necesitaría para ser nombrado valdría, igualmente, para cesarle en el cargo.