Es la tercera iniciativa que se aprueba en el Congreso de los Diputados sobre la materia esta legislatura pero la primera que aborda directamente la regulación de la Eutanasia sin paños calientes ni eufemismos. El proyecto de ley aprobado este martes por el Congreso a iniciativa del PSOE con el apoyo de todas las formaciones de izquierdas y de Ciudadanos, da un paso histórico, al aportar el marco jurídico que permitirá a cualquier persona decidir acabar con su vida.
La ministra de Sanidad, Carmen Montón, se declaró "muy satisfecha" en los pasillos del Congreso porque "es el comienzo de un camino en el que España va a tener una Ley de Eutanasia que nos va a dar seguridad jurídica, garantía médica y libertad a las personas de cómo acabar su vida". Tanto Gobierno como PSOE se afanaron en pedir "dejar a un lado los prejuicios ideológico y religiosos", en palabras de la portavoz parlamentaria, Adriana Lastra, pero la ministra Montón tiró de ellos o contra ellos al fijar como punto de partida dos premisas. La primera, "que hay que entender que la muerte es una parte más de la vida y hay que acudir a ese momento respetando la voluntad de las personas y su dignidad"; y la segunda, que "la lucha por la dignidad de la muerte es la lucha por la propiedad de la vida y en la propiedad de la vida es donde nos estamos moviendo".
Declaración en la que la ministra no hizo mención a los cuidados paliativos de los pacientes terminales ni al sufrimiento como condición exigible a optar por este "derecho universal". Sólo anunció que "cuando se apruebe la ley se modificará la cartera de servicios sanitaria para que sea un derecho, una prestación universal para todas las personas" sobre la base de "una decisión informada, firme y, sobre todo, libre".
Apoyo de Ciudadanos; única oposición del PP
Un "salto hacia adelante", un "tiempo nuevo" para el que el PSOE contó con la única oposición del PP y el inestimable apoyo de Ciudadanos. Formación que ya logró aprobar el año pasado su propia iniciativa sobre la materia, en la que se establecía la "sedación paliativa" o "en fase de agonía" para combatir la "obstinación terapéutica".
Como en las ocasiones anteriores, era el diputado Francisco Igea, médico de profesión, el encargado de fijar la postura de los de Albert Rivera, que siempre han considerado un peligro, como pretendía por ejemplo la iniciativa de Podemos que rechazó el Congreso, dar por buena la voluntad de un paciente que, precisamente como consecuencia de su situación física, pueda estar atravesando una depresión clínica.
Igea, pese al voto afirmativo, comenzaba su intervención con duros reproches a la portavoz socialista Adriana Lastra, a cuenta de su oposición a otra medida, la gestación subrogada, de la que hace bandera la formación naranja. "Nosotros no utilizaremos los argumentos conservadores empleados por la vicepresidenta del Gobierno en esta cámara hace una semana. Nosotros no diremos que esta es una ley que se ha tramitado en pocos países" afirmaba en referencia a las palabras de Carmen Calvo.
PP y UPN
Prácticamente sólo se quedó el grupo popular cuya portavoz, Pilar Cortés, comenzó su intervención calificando de "día triste" que "no seamos capaces de ofrecer a estas personas otra solución que sea la de morir. Es un fracaso". Cortés arremetió duramente contra Ciudadanos por "retratarse" alineándose con los portavoces de izquierdas en lugar de terminar de tramitar la Ley de Muerte Digna propuesta precisamente por la formación naranja. "Señor Igea, me sorprende que Ciudadanos vaya a apoyar esta iniciativa cuando hasta ahora su posición había sido la abstención. Dejan de estar de perfil. Hasta ahora nos hacían creer que eran ustedes de centro pero para ser de centro hay que estar centraos, señorías, centraos".
Más contundente aún el diputado de Unión del Pueblo Navarro (UPN), Carlos Salvador, quien formuló a Ciudadanos una pregunta: "Señorías, si la lógica de su razonamiento es ayudar a morir a quien lo pide, ¿por qué limitar la libertad de una persona, su soberanía, su derecho a decidir, al hecho de estar muy enfermo o de sufrir? ¿Por qué poner obstáculos a su libertad?".