El Mundo dice que "el Gobierno suavizará el asilo y las vallas de Ceuta y Melilla". Que quitará las concertinas que puso Zapatero cuando el problema de los inmigrantes le sobrepasó y se cansó de mirar a los ojos de los negros que llegaban en cayucos a Canarias a cascoporro. Echó al ministro Caldera con una bronca impresionante –"Jesús, te vas porque tu política de inmigración me ha costado muchos votos"–, puso cuchillas en las vallas y sanseacabó el buen rollo. Un poco de memoria, caramba, que ahora con Google está chupado. Dice Rosell que vale, que haga lo que quiera, pero que las concertinas "no exceden la legalidad" y que "más allá de la gestualidad del nuevo Ejecutivo", lo que convendría es no dar "bandazos". Federico Jiménez Losantos da un tirón de orejas a la prensa por no ocuparse de Nicaragua. "154 asesinados en Nicaragua" y "en los telediarios españoles no aparecen las víctimas. Sin medios enredando, los políticos pasan". Tienes razón Federico, pero es que con la que está cayendo... Santiago González está asombrado con el "periodismo de anticipación" de El País. "Al día siguiente de la caída del ministro Huertas El País ya anunciaba un periodismo nuevo, con otro lenguaje y un titular extraordinario sobre otro miembro del Gobierno: "'El ministro Planas, a punto de ser desimputado en un caso de robo de agua en Doñana'. Asombroso. Nunca en los siete días anteriores de su nombramiento leímos un titular que dijera: 'El presidente Sánchez nombra ministro a un imputado por robo de agua en Doñana'". "Es una lástima que el diario de Prisa, al que el periodista Espada le contó 169 portadas sobre los trajes de Camps, no hubiera descubierto aún el periodismo anticipativo para que en la 168 colocara como titular: 'Francisco Camps, a punto de ser absuelto en el caso de sus trajes'". Bueno ahí, Santiago.
El País hace mutis por el foro después de liarla parda y se va por los cerros de Úbeda. Que si "el BCE pone fin a una era de guerra sin cuartel contra la crisis", que si entrevista con Guirao, que si "el Gobierno promete un trato más humano a los inmigrantes", ni rastro del imputado que nos ha colado Sánchez en el Consejo de Ministros después de jurar que no habría imputados en las listas. Parece que en las listas no, pero en el gobierno sí. Cuenta Anabel Díez que Pedro Sánchez ha heredado esa crueldad de Rajoy con los suyos, además del plasma. "La caída de Màxim Huerta se fraguó al amanecer", "nunca tuvo opciones" y "el nombre de Guirao como su relevo ya estaba decidido antes del mediodía". Pero le dejó al hombre, recién llegado a la política, ir por todos los medios de comunicación sudando la gota gorda para defender su inocencia diciendo que Pedro le apoyaba. Hay que tener mala leche. Y todo para que "no le perturbara su reunión con sindicatos y patronal". "¿Por qué el presidente del gobierno no cortó antes las expectativas que pudieron crearse en la opinión pública respecto a que Huerta se mantendría?", se pregunta Anabel. Pues porque "esperaban que aguantara para poner el foco en Sánchez" y salir él bien parado. Pues señor presidente, con todos los respetos, es usted un cabroncete.
ABC abre con el tema inmigración. "Crisis humanitaria, crisis política". Bieito Rubido habla en su Astrolabio sobre la jauría. "Prolifera en España una jauría que destroza reputaciones y trayectorias profesionales. Tiene razón Màxim Huerta cuando la denuncia, pero se equivoca al situarla a un solo lado del espectro político (…) La jauría está con sus dientes afilados en las dos orillas del río". Pues no sé Bieito, hasta hace una semana siempre estaba en la misma. Mientras, tenemos a "un imputado en la mesa del Consejo de Ministros"y "el PP exige a Sánchez que cumpla su palabra y cese al ministro imputado". Porque sea desimputado o no, como dice El País, "Sánchez vuelve a chocar contra sus promesas de boquilla, porque estando aún Planas imputado le abrió de par en par el despacho de un Ministerio, eso es incontrovertible. A ver si la juez de Huelva también va a formar parte de la jauría que denunció el exministro Huerta". Y a todo esto, ¿dónde está el presidente? Pues no dice esta boca es mía, deja plantados a los mandatarios extranjeros que visitan Moncloa ante la prensa, un "mimo en Moncloa", dice Álvaro Martínez. Y este era el presidente antiplasma de la transparencia. Mal empezamos, Sánchez, mal empezamos.
La Razón vuelve a la Cataluña olvidada. Dice que "el TS avisa: sólo retirará la rebelión por imperativo legal". Marhuenda alerta. "Si la nueva fiscal general del Estado, María José Segarra, cambiara de criterio sobre las acusaciones del 1-O, prevalecería su posición, a pesar de que la instrucción de Llarena está concluyendo". "Rebajar en estos momentos la acusación supondría un serio contratiempo". Pues no te adelantas tú ni nada, Marhuenda. Sobre Planas, dice que "el PP pide la dimisión del ministro de Agricultura por estar imputado". ¿Y qué dice el imputado? "Ya di mi versión. Ni yo era competente, ni he tenido intervención alguna ni tenía conocimiento", dijo ayer Cifuentes, perdón dijo Soria, perdón, dijo Ignacio González, perdón dijo Bárcenas, perdón dijo Planas. Es que se parecen tanto que una se confunde. Vuelve a estar de rabiosa actualidad la canción protesta del 15-M. PSOE, PP la misma… es.
La Vanguardia: "Interior y el juez chocan por los presos independentistas". "El ministro Marlaska abre la puerta al acercamiento si lo dicta el magistrado" y el magistrado le arreó un soplamocos: "eso es competencia del Gobierno". Ese marrón se lo come usted solito, señor ministro, a ver si después de poner a caldo a Rajoy por dejar el asunto catalán en manos de los jueces va a venir Sánchez a hacer lo mismo. Le copia el plasma, le copia la estrategia con los imputados y ahora le va a copiar la actuación en Cataluña. Pues vaya rejejeneración.