Fuentes de la Sala de lo Penal del Supremohan reprochado este miércoles de manera no oficial al juez belga que ha rechazado la entrega de los exconsejeros Comín, Serret y Puig su falta de compromiso con la obligada colaboración judicial con España.
El juez belga encargado de estudiar la extradición a España de los exconsejeros catalanes Toni Comín, Meritxell Serret y Lluís Puig ha rechazado la euroorden dictada contra ellos por "defectos de forma" en el procedimiento, al estimar que no tiene "equivalencia" con la orden de detención nacional. La Fiscalía ha informado de que no cabe ningún recurso contra esta decisión por parte de las autoridades españolas.
Las fuentes de la Sala han informado de que están pendientes de recibir la resolución para estudiarla, pero han añadido que, por lo que se conoce hasta ahora por la prensa, consideran que la denegación de la entrega podría interpretarse como una ausencia de compromiso con prestar colaboración judicial.
Estas fuentes recuerdan que el 21 de marzo de 2018 se dictó un auto de procesamiento en donde se expresaban los hechos y los argumentos jurídicos por los que se les consideraba ya procesados, y por los que, a esa misma fecha ya, el instructor adoptaba la medida cautelar de prisión.
Sobre esa misma argumentación del auto de procesamiento, y a petición del ministerio fiscal, el día 23 de marzo se dictó un auto ordenando librar las órdenes europeas de detención, que tienen así una clara resolución de soporte (el auto de procesamiento).
Las mismas fuentes recuerdan que el soporte de la resolución jurídica que es ese auto de procesamiento es el que nuestro ordenamiento jurídico contempla con más desarrollo argumental a excepción hecha de la sentencia.
Solo el desconocimiento de nuestro ordenamiento jurídico, pese a la explicación dada como información suplementaria, permite obviar el auto de procesamiento en el que descansa la euroorden, han añadido estas fuentes.